Kate Middleton, como miembro de la realeza británica, luce algunas de las joyas más fascinantes de todos los tiempos donde destaca su anillo de compromiso, el más icónico de la realeza por haber pertenecido a Diana de Gales. El impresionante zafiro rodeado de diamantes es una pieza imponente valorada en más de 350.000 euros y a veces puede llegar a resultar incómoda por su gran tamaño. Kate ha prescindido de llevarlo últimamente en algunas de sus apariciones públicas y en compromisos más informales.
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La princesa de Gales se quita su anillo de compromiso en sus visitas a los hospitales, seguramente debido a los protocolos sanitarios. En su lugar, opta por un estilo más discreto, pero igualmente significativo: varias alianzas de la eternidad que dan muestras de su estilo personal y su amor por la familia. Los expertos en joyería de Steven Stone, consultados por el Daily Mail, estiman que su colección ronda las 10.000 libras (más de 11.000 euros). “Estas piezas de Kate sugieren que prioriza la sutiliza y el simbolismo por encima de la grandeza, manteniendo al mismo tiempo un aire de elegancia y sofisticación. Aunque su anillo de compromiso se ha visto con menos frecuencia, su continua muestra de amor por el príncipe Guillermo viene reflejada a través de sus anillos de eternidad, que hablan de expresiones de afecto más personales y discretas”.
Estos anillos con piedras preciosas pequeñas y en forma circular “muestran su afinidad por las piezas clásicas y atemporales que reflejan su papel de madre y esposa; han sido cuidadosamente elegidos para que sean significativos en lugar de abiertamente lujosos, lo que se alinea con su imagen de modestia y fuerte conexión con sus seres queridos”. Tradicionalmente, las joyas de los miembros de la realeza se han transmitido de generación en generación y los anillos de compromiso y de bodas son reliquias de lo más apreciadas.
Entre este conjunto se encuentra el anillo Cartier Étincelle con 19 diamantes de talla brillante de 0,24 quilates, junto con 19 zafiros a juego, con un total de 0,34 quilates. Se le vio por primera vez en 2024 y se cree que es un regalo del príncipe Guillermo por su decimotercer aniversario de boda. También tiene una banda de diamantes blancos que aporta una elegancia discreta que complementa a otros anillos manteniendo una simplicidad refinada.
El anillo de eternidad de diamantes con engaste pavé de la colección Eclipse de Annouska, se lo regaló Guillermo tras el nacimiento del príncipe George. Está elaborado en oro blanco de 18 quilates y engastado a manos con 0,23 quilates de diamantes. Lo ha llevado con y sin su anillo de compromiso y su alianza de oro galés. El valor sentimental juega un papel importante en las elecciones de joyas de Kate, lo que le convierte en uno de sus favoritos de su joyero.