Con la llegada de diciembre se da por arrancada la temporada de Navidad. El Palacio Real ya tiene instalado su gran nacimiento, uno de los más espectaculares y con figuras de gran valor con mucha calidad artística. Se trata del emblemático Belén del Príncipe que abrirá sus puertas al público de forma gratuita este viernes. Una instalación que se ha colocado en la Sala Génova a la vez que el gran abeto cuajado de bolas al estilo del que se coloca en el Rockefeller Center de Nueva York o en la Casa Blanca.
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Desde el 5 de diciembre y durante todo el periodo navideño se podrá visitar de forma gratuita. Esta tradición de poner el belén, alcanzó una gran popularidad en el siglo XVIII, tras la llegada de Carlos III desde Nápoles en 1759. A lo largo de los años, Patrimonio Nacional ha continuado con la costumbre de montar el Belén del Príncipe, también conocido como Belén napolitano o Belén del Palacio Real, para que pueda ser disfrutado por todos los visitantes.
Este Belén, iniciado por Carlos III para el príncipe de Asturias, el futuro Carlos IV, se compone de varios centenares de figuras y objetos de origen napolitano y español. Durante el reinado de este último monarca llegó a componerse de más de 5.900 piezas, entre las que se hallaban figuras realizadas por importantes escultores, como Roberto Michel, José Esteve o José Ginés. Con el paso del tiempo se fue disgregando y, en la actualidad, Patrimonio Nacional solo conserva menos de un centenar, a las que en 2001 se añadieron otras tantas para mantener su esencia original.
Además, se ha ido enriqueciendo con elementos que se elaboran cada año en el Departamento de Restauración de Patrimonio Nacional, como el zaguán del Palacio Real, la silla de manos de Corrado Giaquinto o una galería de arte que alude a la Galería de las Colecciones Reales.
Miguel Ángel Gacho, doctor en Historia y escenógrafo de este belén, y Margarita Tapia, miembro del departamento de restauración y especialista en porcelana, han señalado el origen napolitano de este nacimiento y como Carlos III se trajo este nacimiento a España. Este año el guiño que ha hecho Patrimonio Nacional en esta instalación es colocar una maqueta de la rehabilitación de la Casa del Labrador en el Palacio Real de Aranjuez y figuras de alabarderos, que están junto a la entrada del Palacio. También incluye la sala de destilados, donde se destilaban las plantas medicinales y también se ha incluido una réplica de la farmacia que estaba en el Palacio Real, cargado de detalles