A dos días de celebrar su vigésimo cumpleaños, Christian de Dinamarca ha cumplido un sueño de la infancia: ¡pilotar un avión! La Casa Real danesa ha distribuido unas imágenes del heredero al más puro estilo Top Gun, un tipo de fotografías estéticas y efectistas a los que pocos royals se resisten cada vez que visitan a las Fuerzas Aéreas de su país, pero menos habitual es que realmente se pongan a los mandos del avión como ha hecho el hijo de Federico y Maray de Dinamarca al participar en uno de los últimos vuelos de entrenamiento del avión militar F-16.
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En un mensaje firmado por él mismo, el príncipe Christian ha confesado que con su primer vuelo cumple un sueño de la infancia. "Ya sentía un gran respeto por los pilotos que vuelan nuestros cazas, y desde hoy este respeto no ha hecho más que crecer", ha dicho después de pilotar por última vez un F-16, un tipo de avión militar que va a ser sustituido por el F-35. Tras la inolvidable experiencia, que no estaba anunciada en la agenda oficial, recibió la visita de su padre, el rey Federico, que pudo recordar con nostalgia cuando hizo lo mismo que su hijo en 1989.
Acompañado de un piloto experto, Christian de DInamarca despegó este lunes de la base de Skrydstrup, en Jutlandia, para sobrevolar el sur de la península en una experiencia que forma parte de su entrenamiento como teniente que comenzó el pasado mes de agosto. Tras aterrizar, contestó a las preguntas de la periodistas con la sonrisa de quien, efectivamente, acaba de cumplir un sueño.
"Es impresionante lo que ese avión puede hacer", dijo a la prensa danesa, a la que también confesó que no descarta servir en las Fuerzas Aéreas al término de su formación. "Hasta hace una semana, pensaba que era demasiado alto para volar un F-16, pero ahora me he dado cuenta de que no. Así que el tiempo lo dirá. Podría ser. Nunca se sabe", aseguró el Príncipe, que mide alrededor de 1,90 metros.
Sobre su día a día en el Ejército solo tiene buenas palabras: "Me va muy bien, estoy conociendo a muchos jóvenes apasionados y disfrutando de la vida cotidiana". Fue el pasado mayo cuando se anunció que el príncipe heredero, había completado su primera etapa en el Ejército, en el Regimiento de Húsares de la Guardia en Slagelse, entonces ya se advirtió que el futuro rey de Dinamarca había sido aceptado para continuar con su formación militar. Así, en agosto comenzó el Curso de Formación de Tenientes durante un año, al que hay que añadirle un período posterior de servicio práctico como jefe de pelotón. Son las segundas imágenes que vemos de Christian en acción desde que ingresó en el cuartel de Anvorskov, en Slagelse, pero nunca habían sido tan impactantes como ahora que lo vemos en pleno vuelo.