Aunque pocas novias se arriesgan a añadir unas mangas capa a su vestido, los datos revelan que el éxito está asegurado para aquellas que sí apuestan por ellas. La idea es ingeniosa y creativa, pues supone una forma original de unirse a un fenómeno, el de las capas nupciales, que ha cautivado a las prometidas en los últimos años.