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Cuando buscamos el vestido de novia de nuestros sueños, puede que no tengamos claro exactamente el look nupcial que queremos, pero lo que siempre, siempre buscamos es sentirnos la mejor versión de nosotras mismas, sin renunciar a la comodidad ni al estilo personal. Con esta idea como motor de su firma nupcial, la diseñadora británica Savannah Miller lleva una década conquistando el corazón de las novias más bohemias, chic y elegantes.
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En el marco de Barcelona Bridal Fashion Week, epicentro internacional de la moda nupcial e invitada, la hermana de la actriz Sienna Miller presentó su propuesta para el nuevo año, una colección que rinde homenaje a la naturaleza, al arte y al romanticismo. Con ella, hablamos de inspiración, tejidos, estilo y de cómo han evolucionado las novias desde que fundó su firma hace ya diez años.
¿Qué nos puedes contar sobre tu nueva colección?
La colección está inspirada en varias cosas. Principalmente en el pintor Sir John Singer Sargent, que pintaba tejidos muy voluminosos y con textura, de una forma increíble. Surgió a raíz de un vestido a medida que hicimos para una de nuestras novias, Amber, quien se sentía profundamente inspirada por la obra del artista, cuya capacidad para capturar con el pincel el movimiento fluido de los tejidos dejó en ella una huella duradera. Esa influencia se tradujo en las siluetas más dramáticas y con mayor textura de la colección.
Por otra parte, me inspiraron también las flores de mi jardín, exuberantes y vaporosas, y en ese sentido de romanticismo y ensoñación que surge al cuidar de la tierra. Me encanta estar al aire libre y disfrutar de mi jardín. Estoy ‘obsesionada’ con la naturaleza. La admiración que sentí al conectar tan intensamente con la naturaleza influyó en el enfoque texturizado y tridimensional que adopté a la hora de trabajar los tejidos y los volúmenes. Puedes ver todas esas formas y volúmenes escultóricos, y ese jardín en cascada, en los diseños de la colección.
Por último, la fluidez hipnótica del ballet, así como la fuerza y libertad que transmite el movimiento, impregnaron esta colección de una energía romántica y poderosa. Flores escultóricas, texturas en capas y formas voluminosas se unen en una celebración del movimiento y la forma.
¿Cómo definirías a la novia Savannah Miller?
Creo que, ante todo, mi novia quiere ser la mejor versión de sí misma en su boda. De una forma discreta y con una elegancia sin esfuerzo. No quiere parecer que el vestido la lleva a ella, sino al revés: ella es quien lleva el vestido. Es madura e independiente.
¿Con qué tipo de tejidos disfrutas más trabajando?
Normalmente, uso muchos tejidos con caída: sedas, crepés fluidos… Pero esta temporada me interesan mucho más las texturas para crear volumen. Por ello, en esta colección, encontraréis tafetán de papel, encaje en múltiples capas y organza pintada a mano.
¿Cómo encuentras ese equilibrio entre la elegancia y una silueta relajada, más característica del estilo bohemio?
Encontrar ese equilibrio es lo que me motiva como diseñadora: esa elegancia sin esfuerzo y con aire atemporal, y es lo que intento ofrecer a cada novia, siempre con un giro que haga especial al diseño. Ahora, como puedes ver, todo el mundo está haciendo lo mismo en todas partes, así que intento conectar con lo que a mí me gusta para mantenerme fiel a mí misma.
Una de tus señas de identidad es tu estilo bohemio, ¿tu hermana, la actriz Sienna Miller, ha sido una inspiración para ti?
El estilo bohemio de mi hermana fue más bien en 2003, cuando éramos jóvenes y nos vestíamos como hippies porque íbamos a muchos festivales. Así que no fue una elección de estilo como tal, más bien algo que pasó por casualidad. Pero sí, claro que Sienna me inspira. De hecho, la semana que viene nos vamos juntas de vacaciones y me va a ayudar a diseñar la colección. Tiene un gusto increíble, así que es maravilloso trabajar con ella.
Has dicho que te inspira mucho la naturaleza, ¿hay algo más que influya en tus colecciones?
Siempre me ha atraído mucho la década de los 30, los bohemios elegantes, la elegancia en general, el romanticismo, la femineidad… Esas son siempre mis fuentes principales de inspiración.
¿Cómo ha cambiado la novia desde que empezaste a diseñar, sobre todo con el auge de las redes sociales?
Con la irrupción de las redes sociales, todo es inmediato. Y las novias también lo quieren todo ya. Pero en bridal, sin embargo, todo lleva tiempo: desde el diseño hasta la confección, las pruebas… Intentamos mantenernos fieles a quienes somos como marca, y de esa manera la narrativa se mantiene constante.
¿Cuál ha sido tu mayor reto como diseñadora nupcial?
El mayor reto al que nos enfrentamos es la saturación del mercado. Hay mucha competencia. Mantenerte fiel a ti misma y a la vez ser comercial es difícil. Pero es un reto que me gusta y al que me enfrento cada día. Este año, celebramos el décimo aniversario de la firma y, en este tiempo, he descubierto que cuando soy fiel a mí misma y honesta con lo que me parece bello, es cuando llegan los mejores resultados. Como diseñadora, es un proceso continuo de evolución. Intento no pensar demasiado en las tendencias, porque realmente no me importan tanto a la hora de diseñar para novias.
Como comentas, este año cumplís diez años como firma, enhorabuena. ¿Qué balance haces de esta década?
Hemos crecido mucho como marca. Nos hemos centrado en lo que sabemos hacer bien, y también hemos incorporado más estructura a los diseños, para ayudar a las novias a sentirse mejor. Ahora es muy importante para muchas tener corsetería, por ejemplo, cuando antes todo lo que hacíamos eran cortes al bies, sin estructura. Cuando empecé, no sabía muy bien lo que hacía, la verdad, pero ahora entiendo mejor lo que se necesita en un vestido de novia.
Y, por último, ¿qué planes tienes para el futuro?
Seguir creciendo y centrándome en lo que mis clientas, mis novias, necesitan y en cómo se sienten con mis vestidosM