Cada diciembre, desde ¡HOLA! decimos adiós al año con un ranking que desvela quiénes son las mujeres más elegantes para nuestros lectores y nuestro jurado experto. Y, si podemos definir esta votación como una auténtica tradición, asimismo lo es el hecho de que la reina Letizia forme parte del podio, puesto que es, innegablemente, un auténtico referente de moda tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, y lo ha vuelto a demostrar el resultado. Aunque consigue conquistarnos con sus impecables looks de trabajo en el día a día, que combinan diseños atemporales con toques de tendencia, los más espectaculares son, por motivos evidentes, sus estilismos de gala, esos en los que se viste de largo y desempolva joyas históricas y regias tiaras.
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Este 2025 no ha sido hasta el 4 de noviembre cuando la hemos visto en una cita de este tipo, habían pasado nada menos que 566 días desde su anterior cena de gala. Aquel día, homenajearon al sultán de Omán, Haitham bin Tarik, durante su visita oficial a nuestro país. La espera con respecto a la siguiente fue mucho más corta, ya que, apenas tres semanas después, repitió en el mismo escenario, el Palacio Real. Aunque ambas elecciones son muy diferentes, mantenían la sofisticación eterna y la majestuosidad que caracterizan a la esposa de Felipe VI.
El vestido azul de The 2nd Skin Co.
En abril de 2024, los reyes de los Países Bajos recibieron a sus homólogos españoles en el Palacio Real de Ámsterdam, cita en la que doña Letizia estrenó un vestido azul cobalto con lazos en las mangas de The 2nd Skin Co.. Curiosamente, en la que fue su siguiente cena de gala en noviembre de 2025, quiso repetirlo y mostrar con todo su esplendor esta creación de los diseñadores Antonio Burillo y Juan Carlos Fernández, pues en Holanda estuvo sentada todo el rato. "Aunque me encanta que estrene vestido, algo que siempre tiene una emoción especial, entiendo que intente compensar y muchas veces bucee en su propio armario para encontrar el look perfecto, de esta forma, potencia la sostenibilidad y da ejemplo de que no es necesario comprarse ropa para cada evento." señala Paula Callejo, editora de moda en ¡HOLA! y experta en realeza. "En este caso, creo que era una buena idea repetir este modelo que no le vimos bien la vez que lo estrenó, creo que es una opción intermedia muy acertada. El color le favorece mucho, es alegre, pero sofisticado, moderno, pero sobrio y, sin duda, no deja indiferente a nadie" concluye.
Como tiara, recuperó la conocida como rusa, que llevó por primera vez en noviembre de 2018 durante una cena de gala en honor del presidente de China, Xi Jinping, y su mujer, Peng Liyuan. Esta pieza del joyero real perteneció a la reina María Cristina de Habsburgo-Lorena, la segunda esposa del rey Alfonso XII. Esta, que también era archiduquesa de Austria, la estrenó en 1906. La impresionante joya siguió viajando de mano en mano, pues, tras la muerte de esta, la heredó su hijo, el rey Alfonso XIII, quien, con motivo de la boda de su hijo don Juan con doña María de las Mercedes, futuros condes de Barcelona, se la regaló a su nuera en 1935. Cuando falleció María de las Mercedes, don Juan Carlos acordó con sus hermanas quedársela para poder regalársela a doña Sofía, que la estrenó en Noruega en 2006.
"Esto es algo muy personal, pero esta tiara me parece una de las más espectaculares que atesora la Familia Real española. Es absolutamente majestuosa, aunque bastante grande, por lo que es difícil de llevar. Doña Letizia, siendo una mujer muy fina, la defiende de manera sublime, además, la banda de terciopelo que lleva en la base está perfectamente colocada para pasar desapercibida, se camufla muy bien con el pelo y da sensación de flotar sobre la cabeza" destaca Paula.
Un peinado que sorprendió
Aunque el vestido y la tiara son exactamente los mismos que llevó en la citada cena en Ámsterdam, cambió de peinado, sustituyendo el moño liso con raya a un lado por una melena suelta XL completamente rizada que dio la vuelta al mundo. Completó con los únicos pendientes del joyero de pasar, conocidos como chatones y conformados por dos grandes diamantes con orla de pequeños diamantes alrededor.
“Los pendientes de chatones son siempre una elegante elección por parte de la reina Letizia para homenajear a décadas pasadas de monarquía en España. Aúnan tradición, historia y una ostentación sosegada. Tras llevarlos en el retrato de Annie Leibovitz, estas creaciones de la reina Victoria Eugenia más que nunca se convierten en todo un referente de su estilo más majestuoso. En cuanto al vestido, me parece fascinante, equilibrado y de gran porte regio, además de encontrarlo perfecto para que lo hereden sus hijas, la princesa Leonor y la infanta Sofía, cuando debuten de gala. Me alegra que esta obra de arte de costura la hayamos visto a la perfección y no como en Países Bajos, que pasó ligeramente desapercibido al estar sentada.”, precisa Luis Javier Merino, jefe de moda en ¡HOLA!. “Y si su look es sublime, ella volvió a sorprender a través de su peinado, pues rompió con tradiciones al llevar su melena suelta y con unas ondas muy marcadas. De este modo, parecía mandarnos un mensaje en el que nos dejaba adivinar que, en cuanto a estilo, tiene todavía mucho que decir”, añade.
Nuevo vestido, misma elegancia
Tres semanas después de recibir al sultán de Omán, los Reyes hicieron lo mismo con el presidente de la República Federal de Alemania Frank-Walter Steinmeier, y la primera dama, Elke Büdenbender. En el acto más esperado de este viaje, la cena de gala ofrecida en el Palacio Real, la Reina volvió a brillar y nos dejó boquiabiertos con un nuevo vestido negro hasta los pies, una pieza de escote cuadrado, falda acampanada y mangas cortas decoradas a base de bordados de pedrería que conforman motivos florales. Remató con unas sandalias de tacón alto y plataforma de la colección de Redondo Brand para Martinelli.
"No soy muy de vestidos negros de gala, creo que a la Reina le sientan mejor otros colores como el azul o, sin duda, el rojo Letizia, que hace mucho que no vemos en un evento de este calibre. Sin embargo, es cierto que este nuevo modelo le quedaba como un guante, y el diseño no puede parecerme más bonito, acertado y favorecedor. El corte le realza la figura, y el detalle de las mangas es precioso. La Reina es moderna a la vez que elegante, sabe cómo arriesgar sin excederse. Además, debo admitir que, al ser tan oscuro, cede más protagonismo a las joyas de diamantes, que, al final, son las protagonistas en estos actos" cuenta Paula.
En cuanto a la tiara con la que completó el estilismo, sorprendió con una pieza histórica que solo le habíamos visto en una ocasión: la de Cartier. Esta joya fue diseñada por la casa francesa que le da nombre en 1920 y cuenta con un diseño de inspiración Art Déco, en el que vemos diamantes sobre una base de platino y siete enormes perlas, que sustituyen a las esmeraldas originales de Eugenia de Montijo, a quien perteneció en primer lugar. Posteriormente, pasó a manos de la reina Victoria Eugenia y, luego, su sobrina María Cristina, tía del rey Juan Carlos, quien llegó a un acuerdo con ella y la recompró para la reina Sofía, de quien la ha heredado la reina Letizia.
"Antes he señalado que la tiara rusa es de mis preferidas, pero me encanta que innove y vaya variando. Me aburre un poco cuando las reinas y princesas apuestan continuamente por las mismas joyas, con la cantidad de piezas que tienen para elegir ¡yo luciría una diferente cada día! Además, la Cartier es una pieza que asociamos mucho a la reina Sofía, ya que es una de las que más ha llevado a lo largo de los años, así que genera una conexión especial entre ellas que siempre es bonita" confiesa Paula.
“No hay duda de que en esta cena de gala estaba elegantísima e imponente. Sin embargo, coincido con mi compañera Paula de que me gusta más cuando elige otros colores para sus looks de gala. Sin embargo, el negro es una apuesta segura y ella lo sabe. Eso sí, el detalle de las mangas hace que el vestido tenga un acabado más grandioso, perfecto para una cita de esta magnitud. Y aunque en esta ocasión su peinado era más clásico, es incuestionable que era una opción muy pulida que le favorecía”, comenta Luis Javier Merino.
