Que Diana de Gales continúe inspirando en moda hoy en día no es un fenómeno casual. Cada una de sus elecciones estilísticas desde los más imponentes vestidos de gala hasta sus looks más informales, escondía un propósito. A veces, la ropa era su armadura o su voz, desafíos a la rigidez de la monarquía. En otras ocasiones, sus looks reflejaban su estado de ánimo a través de la colorimetría, o seguían estrictos códigos estilísticos que el título de princesa requería. Sin embargo, en el fondo, Diana Spencer era una mujer que comprendía el poder de la ropa para favorecer la figura y resaltar sus cualidades.
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Más allá de las declaraciones y las reglas, la royal elegía sus conjuntos para tratar de sentirse, y tratar de transmitir, una imagen segura y poderosa. Y, es que Lady Di no solo fue una figura real, sino que fue un auténtico fenómeno de la moda. Ella rompió el estricto protocolo de la monarquía británica y la estableció como un icono global, dejando un legado que perdura hasta el día de hoy. Más allá de su icónico 'vestido de la venganza' o sus elaborados trajes de gala, hubo una fórmula de estilo que Diana repitió incansablemente, demostrando que la verdadera influencia reside en la combinación perfecta: prendas holgadas en la parte superior con piezas ajustadas en la inferior.
"Lady Di fue y es un auténtico icono de estilo que rompía con lo convencional dentro de un mundo uniformado y clásico como era la familia real británica en los 80 y 90”, asegura la estilista de moda Blanca Hidalgo (@ blancahidalgoh_). La princesa dominó el arte del equilibrio visual, optando por una silueta que le permitía destacar sin abrumar. Con una estatura considerable, Diana de Gales evitaba los looks completamente ceñidos que podrían haberla hecho parecer aún más alta, y en su lugar, se apoyaba en prendas que enfatizaban sus hombros y daban estructura a su figura, como sudaderas oversize, americanas con hombreras o camisas con mangas abullonadas. La parte inferior, por su parte, se mantenía ajustada, con mallas de ciclista, vaqueros de tiro alto o faldas lápiz, realzando así sus piernas largas.
“Ya fuese más casual o formal, Diana conseguía una figura moderna y fuerte al combinar prendas que estructuraban sus hombros, con piezas ceñidas en la parte de abajo para potenciar también sus piernas largas. De esta manera conseguía también sofisticar y equilibrar sus looks: al no abusar de looks muy ceñidos evitaba el foco en su altura”, explica Blanca Hidalgo. Esta elección de estilo no era solo una cuestión de estética, sino también una declaración de intenciones. Era un rechazo sutil pero poderoso al mundo “encorsetado y lleno de normas al que pertenecía”, como apunta la estilista. “Por ello, quizás repetía esta fórmula con la que se sentía cómoda y con la que, además, se alejaba del mundo”.
¿A quién le favorece la fórmula de Diana de Gales?
La genialidad del estilo de Diana radica en que no era exclusivo de ella, sino que es una fórmula versátil que se adapta a diferentes tipos de cuerpo. De acuerdo con la experta en moda, es especialmente beneficiosa para quienes tienen una figura rectangular. “Sin duda, esta fórmula es ideal para cuerpos con forma rectangular. Consiguen crear curvas y potenciar partes del cuerpo que quizás con otras estructuras pasan más desapercibidas", apunta. Aún hay más, pues quienes tienen hombros anchos y caderas estrechas también pueden copiar los looks de Lady Di al detalle. En este caso, el volumen en la parte superior "difumina la anchura de los hombros y centra la atención en la parte baja”, logrando una silueta más armoniosa.
¿Y si la figura es la opuesta, con una espalda estrecha y caderas más anchas? En ese caso, la estilista recomienda invertir la fórmula o apostar por un look completamente oversize. "Se recomienda optar por invertir esta fórmula, combinando, por ejemplo, camisetas ceñidas o camisas estrechas y estampadas con pantalones más baggy, o faldas largas con vuelo. Incluso también puedes optar por un look completamente XL, usando partes de arriba y de abajo anchas que creen sensación de curvas y disimulen la cadera”. El secreto, según Blanca Hidalgo, está en elegir "prendas estructuradas y no muy caídas” para evitar un efecto descuidado.
Diana hoy: cómo adaptar el legado a la vida moderna
El estilo de Diana de Gales sigue siendo una fuente de inspiración constante en la actualidad. Tanto es así, que han sido muchas las tendencias de moda que ella lucía que, a día de hoy, continúan estando en alza. De hecho, muchas de ellas han vuelto al universo del textil tomando a la princesa como referencia. Ciertas colecciones de marcas de lujo, y apariciones de celebrities y referentes en photocalls han vuelto a poner el estilo de Lady Di de moda. O mejor dicho: nunca lo han dejado ir.
“La fórmula de parte de arriba oversize y parte de abajo ajustada encaja muy bien en nuestro día a día", afirma la estilista, que considera a la princesa “una inspiración constante” por la modernidad y versatilidad de sus looks. La experta en moda propone varias ocasiones en las que incorporar este match de estilo en ocasiones diferentes:
- Para la oficina: Al buscar un look sofisticado y con personalidad, sugiere apostar por un clásico atemporal: "Una americana vintage de hombre”. Estas prendas, además de ser ligeramente oversize, “suelen tener una hombrera no excesivamente marcada que potencia los hombros y sofistica un look”. Ideal para combinarla con "un pantalón flare ajustado en la cintura y los muslos, pero con un ligero ancho tras la rodilla, y añadir un cinturón para ceñir la cintura".
- Para un look casual: Cuando la idea es ir cómoda, pero no sacrificar el estilo, "una sudadera ancha, de algodón de calidad y con el cuello cerrado es la pieza clave”, aconseja Blanca Hidalgo. Esta prenda se puede combinar fácilmente con "unos pantalones capri para un aire más moderno, creando un conjunto perfecto para el día a día que rompe con el aire excesivamente deportivo".
- Para ocasiones formales: La fórmula de Diana también puede aplicarse a eventos especiales como bodas o celebraciones. La clave, según la estilista, está en elegir “un vestido tipo lápiz pero con hombreras o con una forma especial en la zona de los hombros”, creando así un look elegante que resalta la figura de forma sutil.
Así, más de dos décadas después de su fallecimiento, el estilo de Lady Di sigue siendo un manual de estilo vivo, demostrando que un verdadero icono de la moda nunca pasa de moda. Aunque son muchas las royals que han marcado un antes y un después en la moda, ninguna como ella se ha mantenido, durante tanto como tiempo, en el podio de las más inspiradoras. Revisar su lookbook es sinónimo de encontrar siempre un estilismo que copiar, sea la ocasión que sea.