Con el color verde como tendencia ganadora (aunque no única), Kate Middleton siempre ha impactado con sus looks en el Día de San Patricio, esa jornada histórica cada 17 de febrero en la que se conmemora la muerte del Patrón de toda Irlanda. Presente en estas celebraciones desde 2012 (solo se ausentó debido a su inminente viaje a India en 2016, al cancelarse el acto por la pandemia en 2020 y debido a su cirugía abdominal en 2024), el gran cambio de la princesa de Gales es patente y, aquí, lo comprobamos con sus elecciones de moda.
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Este año, Kate Middleton se alejó del color verde más tradicional para definir su imagen a través de la gama del turquesa. En concreto, estrenó un abrigo-vestido con botonadura forrada en el pecho, cuello elevado, manga larga con abertura en el puño y banda marcando el talle, de Catherine Walker. Lo combinó con unos nuevos salones de ante al tono (modelo Gianvito 105) de Gianvito Rossi y una cartera de estreno de Emmy London.
A juego con su abrigo-vestido de Catherine Walker, uno de sus sellos de confianza como también lo fue de Diana de Gales, Kate Middleton estrenaba un sombrero de fieltro con forma de corazón y detalle de crin plisado, de Jane Taylor.
Después de la cancelación presencial en las celebraciones de San Patricio por la pandemia del coronavirus, Kate Middleton no quiso perderse este acto en 2002. Un retorno en el que aprovechó para estrenar un abrigo verde, en largo midi, cintuirón al tono, trabillas en ellos hombros y cuello de grandes picos, de Laura Green London.
Lo combinó con un tocado tipo pillbox con lazada de de Lock & Co y salones de ante de Emmy London. Como joyas, prendió de su pecho un broche con forma de trebol dorado, herencia del joyero de la Familia Real Británica, y unos pendientes de dos esmeraldas y veinte diamantes de corte ovalado.
Debido a las restricciones por la crisis sanitaria del coronavirus, este año no hubo desfile. Sin embargo, los por entonces duques de Cambridge quisieron participar telemáticamente y enviar un mensaje ante tan señalada festividad. Ese día, Kate Middleton apostó por moda española y estrenó una chaqueta de tweed en vibrante verde manzana y doble botonadura dorada, de Zara (49.95 euros). Para acompañar su look, lució piezas de joyería de Daniella Draper: pendientes de aro y cadena muy fina con colgante en forma de trebol.
En este año, Kate Middleton quiso que la firma que confeccionó su vestido de novia, Alexander McQueen, fuera quien creara su abrigo verde botella de estreno. En concreto, y siguiendo la estética militar que le ha marcado en esta celebración en numerosas ocasiones, lució un diseño con cotonadura dorada, bolsillos de grandes solapas y hombros muy armados.
Para cubrir su cabeza, la por aquel entonces duquesa de Cambridge estrenó un tocado tipo casquete que se realzaba con motivos florales en un lateral. Como joyas, Kate lució sus pendientes de turmalina y amatista de Kiki McDonough.
Ese año, Kate Middleton se encontraba en la recta final de su tercer embarazo (el 23 de abril nacería el príncipe Louis). Aquel día, lució otro diseño de Catherine Walker, un abrigo largo en tono verde botella con botones forrados, que acompañó de cuello de piel falsa de Troy London. Debido a su estado, se decantó por unos salones de tacón ancho que era mucho más cómodo que uno fino, de Tod’s. También lució una cartera de mano de Mulberry.
Para acompañar su abrigo de Catherine Walker, Kate Middleton quiso lucir en su pecho un broche dorado con el símbolo de la guardia irlandesa. No podía faltar en esta celebración un tocado que, en esta ocasión, era de color verde y mostraba un gran lazo al tono, de Gina Hoster. En cuanto a sus pendientes, lució unos de amatista y turmalina, de Kiki McDonough. Eran los mismos del año anterior.
De color verde esmeralda y con detalles de terciopelo en contraste en cuello, bolsillos y puños: Kate Middleton lució se año un abrigo-vestido de Catherine Walker que se realzaba con botonadura doble en color dorado que adornaba su pecho.
Ese día, Kate recogió su melena con un moño bajo que le permitió llevar a la perfección su tocado tipo plato en color verde oscuro de Lock & Co, una tonalidad que se coordinaba con sus pendientes de ónix de Mónica Vinader, los mimos que también la reina Letizia en su joyero.
En esta edición, Kate Middleton sorprendió al apostar por un look monocolor en tono marrón, diciendo ‘adiós’ al color verde más tradicional. La por entonces duquesa, que estaba embaraza de siete meses de la princesa Charlotte, lució un abrigo con cuello camisa y largo a la rodilla, de Catherine Walker.
Como complementos y también en tono marrón, Kate Middleton lució un elegante pillbox en la cabeza, Sus zapatos y bolso a juego eran de Emmy London. Sus pendientes de ámbar y sus tradicionales tréboles sobre el pecho ponían una ligera nota de color al look.
Este año, Kate Middleton lució un abrigo-vestido de paño que simulaba el corte de una gabardina de estilo años 40. Un diseño de Hobbs que ciñó a su silueta con un cinturón de piel de cocodrilo en un tono verde más oscuro.
En lugar de recoger su melena, Kate decidió llevarla suelta, lo que le sentaba de maravilla. Como tocado, lució uno tipo casquete con gran lazada, de Gina Hoster.
La festividad de San Patricio también coincidió con el primer embarazo de Kate. Cuando estaba esperando al príncipe George (este nacería el 22 de julio), Kate Middleton optó por un conjunto estiloso compuesto por un abrigo-vestido verde de cuerpo entallado y falda evasé de Catherine Walker. Bajo este, lució un jersey de cuello perkins negro, medias tupidas y tacones al tono de Episode.
Aquella fue la única vez que apostó por un tocado negro, en concreto por un modelo tipo casquete decorado con una flor al tono, de John Lock. Como joyas, se decantó por unos pequeñísimos pendientes colgantes de diamantes y esmeraldas.
En su primera celebración oficial de San Patricio, Kate fue totalmente fiel a su estilo y optó por un abrigo-vestido de Emilia Wickstead, cruzado y con falda en línea 'A' por la rodilla. Añadió cinturón de efecto cocodrilo y zapatos de tacón marrones, de Emmy London.
En su estreno, optó por lucir complementos a contraste, por lo que escogió el tocado clásico en tono marrón decorado con lazo que posteriormente recuperaría en 2015. Es una creación de la firma Lock & Co. Como pendientes, luce unos de Kiki McDonough con amatista verde.