Las plantas medicinales que recomiendan los farmacéuticos en primavera
Ayudan a combatir la astenia, las alergias...
La primavera recién estrenada es una etapa en la que nuestro organismo se tiene que adaptar a múltiples cambios que no siempre nos sientan bien: “La primavera es la estación de los cambios en la naturaleza, y nosotros, que formamos parte de ella, también nos vemos afectados por estos cambios”, apunta la farmacéutica Mar Sieira, alma mater de la firma Sarah Becquer. Y las plantas medicinales se pueden convertir en buenas aliadas de nuestra salud en estos días que acabamos de estrenar, ayudándonos a sobrellevar mejor los ‘daños colaterales’ de la nueva estación. Con la ayuda de la experta, vamos a revisar cuáles son las afecciones más características que podemos padecer en primavera y las plantas medicinales que nos pueden ayudar a sobrellevarlos.
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Astenia primaveral: rhodiola
La astenia primaveral está considerada un trastorno adaptativo. Algunos de los síntomas incluyen cansancio y somnolencia durante el día, fatiga, irritabilidad incluso pérdida del apetito. Realizar ejercicio regularmente, hacer actividades al aire libre y dedicar tiempo a la relajación son algunas actividades que pueden actuar como medida preventiva.
“Además, la rhodiola es una planta adaptógena maravillosa para combatir la astenia primaveral, ayudando al organismo adaptarse al estrés y a situaciones exigentes. Combate la debilidad y la fatiga, mejorando la concentración y la resistencia. Se utiliza su raíz, muchas veces mezclada con otras plantas medicinales como la salvia, la menta y el romero, en infusión o bien en cápsulas o comprimidos”, nos cuenta.
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Astenia primaveral: té verde
El té verde es una alternativa eficaz para combatir la astenia primaveral. Junto a la cafeína o teína, que contiene en menor proporción que el café, aporta valiosos antioxidantes y ofrece un suave efecto estimulante, útil para combatir dicha astenia psicofísica. Se recomienda tomar en infusión a la que puedes añadir unas gotas de limón y unas hojas de menta.
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Alergia: perpetua o siempreviva
La primavera trae consigo diminutas partículas de polen que generan síntomas en aproximadamente 8 millones de alérgicos en España. Entre sus síntomas encontramos conjuntivitis, rinitis, sinusitis y asma. Es aconsejable purificar el aire del hogar y mantener las ventanas cerradas, sobre todo, de cinco a diez de la mañana y de siete a diez de la noche, que es cuando el polen está más activo.
¿Y qué plantas nos viene bien? La perpetua es una planta con actividad antiinflamatoria, bacteriostática, antiespasmódica, y antialérgica. Estimulante natural de la secreción interna de hidrocortisona. Es eficaz para aliviar los síntomas de la alergia causada por el polen, polvo y ácaros, siendo especialmente útil para tratar la conjuntivitis, bronquitis y rinitis alérgica. Se suele utilizar en infusión, hasta 3 tazas diarias, o también en jarabe. Para tratar la inflamación ocular se utiliza la infusión para baños oculares o aplicación sobre la zona compresas impregnadas en dicha infusión y aplicadas sobre la zona a tratar.
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Alergia primaveral: infusión de saúco y regaliz
Mar Sieira advierte, lo primero de todo, que deben evitarla las personas hipertensas. Es un gran remedio para combatir os síntomas de la alergia como picor e irritación de la nariz. La flor de saúco disminuye la inflamación de garganta o la congestión nasal, y el regaliz actúa como un eficaz antihistamínico natural. Además, tiene la virtud de suavizar las vías respiratorias y promover la eliminación de toxinas del organismo.
Reacciones dermatológicas: consuelda
En ocasiones podemos padecer sequedad o pequeñas erupciones en la piel. Siempre es recomendable usar protección solar, y utilizar ropa de tejidos naturales como el algodón. También es fundamental secarse bien después de la ducha e hidratar bien la piel. La consuelda, con acción antiinflamatoria, cicatrizante y regeneradora, está indicada para este tipo de afecciones, que incluyen irritación, y pequeñas llagas en la piel, ya que ayuda a restaurar las mucosas dañadas y cicatrizar heridas. El uso de su raíz, que es la parte medicinal, es exclusivamente tópico (no tomar por vía oral). Puedes encontrarla en forma de pomada o en decocción, en forma de compresas impregnadas en su infusión y aplicadas sobre la zona a tratar.
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Sistema inmunitario: Equinácea
En primavera conviene ayudar al sistema inmunitario, ya que en algunos casos se debilita y pueden aparecer resfriados, de evolución más corta que en invierno. Para ello, la equinácea es una de las plantas clave de la primavera. Puede utilizarse de forma preventiva o cuando aparecen los primeros síntomas del resfriado o la gripe.
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Combatir síntomas resfriado: eucalipto
El eucalipto es otra de las plantas que hay que tener a mano en primavera para combatir los síntomas del resfriado, ya que es muy eficaz para frenar los síntomas de las afecciones de las vías respiratorias. Es broncodilatador por sus propiedades balsámicas y estimulantes. También destaca por ser expectorante y antiséptico.
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Brotes de alergia: el Gordolobo
Es una planta expectorante, mucolítica, antitusígena y antiinflamatoria. Está indicada para tratar brotes alérgicos que incluyan tos, estornudos e irritación de garganta, debido a su contenido en mucílagos, combate la irritación de las vías respiratorias. Es una planta muy eficaz frente a la rinoconjuntivitis con obstrucción y secreción nasal. Se utiliza preferiblemente en infusión.
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