1/10 © Maisons du Monde

Pese a lo que diga Pantone y a su elección del ‘Very Peri’, las tendencias de decoración han coronado al verde, en todas sus variantes y versiones, como el color de moda de 2022. Obtenido de la mezcla de dos colores primarios, el amarillo y el azul, se encuentra en el límite entre los tonos fríos y los cálidos. Así, cuanto más amarillo contiene, más cálido es, y cuanto más azul, más frío. Pero no debemos olvidar que esta temperatura cromática es ante todo una cuestión de percepción y cultura.

 

La casa en verde

Asociado al mundo vegetal y a la naturaleza, estamos ante una tonalidad que tiene propiedades calmantes, refrescantes y tonificantes. Por lo tanto, es apto para todas las estancias siempre que sepas cómo dosificarlo y utilizarlo. Estas ideas de decoración te ayudarán a introducirlo adecuadamente en tu casa. Lo querrás contigo, también en tus ‘looks’, para toda la vida.

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2/10 © Culto

Psicología del color

Vinculado con la naturaleza y la salud, actualmente hay que destacar su carácter ecológico. Sin olvidar que en el Feng Shui es sinónimo de crecimiento, renovación y transformación y que siempre transmite sensación de limpieza y desinfección: solo tienes que pensar en la etiqueta de algunos productos para limpiar la casa. Conocido también por sus propiedades calmantes, distintos estudios han demostrado que un entorno verde ayuda a reducir la fatiga e, incluso, a mitigar el dolor.

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3/10 © String Furniture

Una paleta cromática llena de posibilidades

Pensar en verde es hacerlo en todas sus variantes: clorofila, absenta, almendra, esmeralda, celadón, abeto, manzana, lima, caqui, salvia, menta, oliva… Directamente asociado a la vegetación, la carta del verde es muy amplia y las tonalidades que resultan de ella se asocian, en su mayor parte, con la naturaleza o el mundo mineral. Cada uno de sus tonos describe un ambiente diferente, desde los más ‘chics’ a los más clásicos, pero todas aseguran una atmósfera de serenidad.

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4/10 © Ligne Roset

Ten en cuenta la luz del espacio

A la hora de optar por este tono, es fundamental pensar en la luz de la habitación, tanto natural como artificial, ya que incide directamente en el acabado final y en nuestra percepción del color. De manera que un verde puede parecer más o menos apagado según la iluminación de la estancia, teniendo en cuenta, además, que no es lo mismo recibir la luz directa de una lámpara de techo que la indirecta de un modelo de pie. Y esta diferencia también influye en el resultado.

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5/10 © Armac Martin

Estancia por estancia

Aunque tiene la puerta abierta a todas las estancias, y la cocina le ha elegido como su color preferido, según su tonalidad e intensidad, el verde se adapta mejor a una habitación que a otra. Por eso, se siente más cómodo en el salón y el dormitorio, aunque siempre es cuestión de matices. Un verde oscuro como el inglés o el botella proporcionará un ambiente sereno y elegante en un estar, biblioteca u oficina, mientras que uno ácido es ideal para aportar una nota de energía en un cuarto infantil o un baño, cuando se usa en pequeños toques. 

6/10 © Sherwin-Williams

En las paredes

El verde se cuela por la puerta grande este 2022, convirtiéndose en uno de los colores ‘top’ para pintar la casa. En función de la luminosidad, los metros y la decoración puedes optar por tonos oscuros y dramáticos o por claros y delicados. Estos últimos serán tu mejor aliado en estancias oscuras o sin ventanas donde aportarán un plus de luminosidad. Si tienes miedos a sus efectos, incluso en estos tonos, una buena idea es optar por una pared de acento y así dar carácter y personalidad, pero sin poner en peligro cromático al resto de la decoración.

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7/10 © Gastón y Daniela

En pequeñas dosis

Si quieres apuntarte a esta tendencia de decoración, pero no estás preparada para un 'total look', lo ideal es introducirla en pequeñas pinceladas. Estos toques pueden venir en forma de bonitos jarrones, vajillas, manteles, auxiliares o, incluso, ropa de cama como almohadones y fundas nórdicas. Como se trata de un color lleno de posibilidades y variantes, podrás elegir el tono que mejor encaje contigo y con tu decoración, según tu grado de atrevimiento. No olvides divertirte en el camino. 

8/10 © Divine Savages

Cuál elegir

Si ya estás dispuesta a ver tu casa 'green', solo te queda elegir la tonalidad que mejor encaje con tus deseos y estilo decorativo. El verde invita a tus paredes a estimular tu imaginación y por tanto tu creatividad, así un caqui equilibrará un salón a todo color, un oliva aportará sofisticación y sobriedad y un potente botella logrará sensación de hogar y opulencia. Como norma general, los tonos intensos garantizan un ‘look’ moderno y contemporáneo lleno de frescura, aunque deben usarse con moderación, especialmente si se combinan con blanco, mientras que los suaves, pálidos o pasteles propician la calma y la serenidad, incorporándose fácilmente a la decoración de estancias donde se necesite un ambiente relajado para descansar o trabajar.

9/10 © Bruguer

Fácil de combinar

Podríamos afirmar con certeza que el verde armoniza con todos los colores (o casi), moviéndose igual de bien entre tonos pastel como con tierras como el beis, el marrón o el terracota. La forma de combinarlos depende de tu grado de osadía. Así, puedes introducirlo en un base neutra siendo el color secundario (30% del total) o usarlo como predominante en un 60% del ambiente, incluidas paredes y mobiliario principal.

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10/10 © Manuel Canovas

Asociaciones que funcionan

Según el efecto que quieras lograr, debes combinarlo con una tonalidad u otra. Con el rojo, su color complementario, se ensalzan mutuamente, con marrón o ‘taupe’ crean un cóctel de elegancia, celadón y amarillo te transporta a la Provenza, el anís con tonalidades cálidas es perfecto para un toque pop, mientras que el manzana con blanco proporciona sensación de hogar. Si buscas una nota retro acogedora, nada mejor que un caqui o un oliva con azul, naranja o beis y recuerda que los verdes oscuros combinan a la perfección con violetas, rosas, amarillos pálidos y azules vivos con los que dibujan atmósferas sofisticadas de espíritu un tanto clásico.

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