Ideas de decoración

Tu casa de campo en la ciudad: ideas para lograr el estilo rústico más elegante y cálido


Este estilo, que combina la autenticidad rústica con la elegancia contemporánea y donde las piezas recuperadas, los azulejos y los objetos son siempre bienvenidos, es perfecto cuando llega el frío y buscas una atmósfera 'cozy'.


Salón con chimenea, con cuadros sobre la chimenea, alfombra de fibras vegetales, mesa de cristal y madera, sofá verde, butacas blancas con cojines, taburete de madera con taza de café, aparador alto de madera tipo archivador, lámparas de sobremesa encendidas © El Corte Inglés
14 de noviembre de 2025 - 9:51 CET

La decoración campestre chic combina la autenticidad rústica con la elegancia contemporánea. Llena de antigüedades, objetos inverosímiles que no sabes para qué valen, madera, azulejos ‘viejos’ lleno de encanto… Es un estilo que evoca la cera de abeja, la ropa de cama calentita y los desayunos bajo la parra o junto a la chimenea, pequeños placeres que hacen el día a día más agradable. Perfecto para el verano, durante el invierno ayuda a crear la atmósfera 

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Lejos de ser un cliché, funciona igual de bien en un piso que en una casa de campo tradicional. ¿Su secreto? Materiales naturales, paredes con textura, objetos con historia y ese encanto imperfecto, que hace que una vivienda sea un hogar y convierte lo diferente en auténtico. Estas ideas de decoración, muchas de las cuales no necesitan obra, mucho tiempo o un gran desembolso, te permitirán adoptar una estética que tiene todo para seguir siendo tendencia en 2026.

En esta propuesta de El Corte Inglés encontrarás toda la inspiración que necesitas. Desde materiales que acogen, entre los que no faltan las fibras naturales o la madera, hasta piezas especiales como el aparador, tipo archivador, la mesa auxiliar o la de centro con el sobre de cristal. Sin olvidar, la espectacular chimenea, broche perfecto del ambiente. 

© Enric Badrinas

Madera sí, pero en tonalidades claras

Imposible evocar este estilo sin hablar de la madera. Eso sí, en tonos claros, que aportan luminosidad, sin perder su esencia. La apreciamos en suelos, paredes, muebles o techos. Es un material imprescindible por su capacidad para transformar cualquier espacio en un refugio acogedor. Valora su imperfección, sus vetas irregulares, su calidez y su autenticidad. Condiciones que siempre son bienvenidas a la decoración. 

Uno de los aspectos más transformadores de este proyecto de Bombí + Gómez en la Cerdaña fue la sustitución de las maderas oscuras originales por claras, que redefinen la atmósfera de la casa y refuerzan la sensación de amplitud. Esta elección se aplicó de manera integral en el pavimento, las escaleras, el mobiliario o la cocina, generando un hilo conductor en toda la vivienda. 

© Viu Empordà

Piezas y elementos con historia

Despensas, vitrinas, aparadores o alacenas son esas piezas perfectas para crear hogar y derrochar encanto. Pero también valen puertas viejas que se convierten en mesas o radiadores de hierro que te recuerda a la casa de tu abuela. 

Este comedor con chimenea, que pertenece a una de las viviendas de Viu Empordà, invita a quedarse a merendar o a comer. Nos encanta la estantería de madera, tipo platero, para tazas y copas, pero también la vitrina con cajones en el medio. 

© Son Fogueró

Mezclar lo antiguo con lo nuevo 

Lo bueno que tiene este estilo es que se adapta y evoluciona, sin perder su esencia original. Por eso, combinar piezas antiguas con elementos de diseño es una buena idea de imprimir ritmo a la decoración y personalidad al ambiente. Se trata de que no sea un calco de una casa de campo, sino que tenga su propio carácter, sin pretensiones, pero capaz de transmitir muchas sensaciones. 

En esta habitación del hotel Son Fogueró se mezclan estilos de manera armoniosa, logrando una atmósfera auténtica y en calma, que busca que te sientas a gusto rodeada de cosas bellas y naturales. 

© Eugeni Pons

Paredes con textura

A veces simplemente vale con una mano de pintura para que la casa de campo aparezca sin darte cuenta en tu piso de ciudad. Lo ideal son las pinturas con textura que aportan un aire imperfecto y natural. Respecto a los colores, todos aquellos que transmitan calma, con el blanco en sus muchas variantes a la cabeza, y otros tonos como el verde salvia, el beige o el gris perla. Si quieres romper la monotonía, introduce una nota vibrante en los detalles, como cojines o jarrones. 

Esta casa reformada por Angel Martin Studio preserva su esencia rural e incluye ciertos toques de lujo discreto. Sus paredes revocadas con mortero de cal y los techos blancos con vigas de madera originales crean un ambiente acogedor, realzado por los grandes ventanales con cortinas blancas de suelo a techo, el gran sofá modular de lino o la alfombra de yute.

© Mobalpa

Una gran mesa de madera con banco 

Parece que no hay casa de campo sin una gran mesa de madera donde se reúna la familia y los amigos. Un lugar de encuentro, que se aleja de los típicos comedores formales, creando un espacio alrededor del cual gira la vida y el día a día. 

En esta proyecto de la interiorista Sarah Poniatowski, en colaboración con Mobalpa, la madera es el hilo conductor, junto a las piezas verde oliva. La mesa rectangular se acompaña con bancos, una solución que, además de encajar muy bien en este estilo, ofrece más número de asientos, sin recargar el ambiente. 

© Ca'Pietra

Azulejos con aire 'vintage'

Los azulejos son siempre una manera de aportar un toque rústico y especial a la estancia. Blancos o de colores, lisos o con motivos, los vemos en el baño, pero sobre todo en la cocina. Pueden revestir una pared, el antepecho, la encimera o una mesa tocinera. A su favor tienen tanto su poder decorativo como su funcionalidad, ya que protegen y son fáciles de limpiar. 

Los de esta propuesta son de Ca'Pietra y derrochan estilo, sobre todo junto a esta cocina antigua, que todos querríamos tener en nuestro piso. 

© Derek Pedros

Detalles con un punto rústico

Una de las maneras más sencillas de evocar esta estética campestre chic, sin tener que hacer obras, es eligiendo objetos y accesorios que podríamos ver en un establo o en una casa de pueblo de las de antes. Pensamos en aparejos de labranza, cazuelas de cobre, cestos

Este proyecto del estudio Ábaton es una prueba de cómo los materiales originales y los detalles ayudan a mantener la esencia rural de un ambiente. El banco de madera (otra vez presente) se convierte en la pieza central del recibidor, junto a él, no podemos pasar por alto la alfombra redonda de fibras vegetales y los sombreros que cuelgan en una de las paredes. 

© Very

Textiles cálidos

Aunque estemos en invierno con la calefacción a tope o, incluso, en verano, una casa de campo siempre encuentra en los textiles cálidos un buen compañero de cuarto. Lana, algodón, terciopelo (una de las tendencias de la temporada) o tejido de pelo conforman el vestuario ideal. Respecto a los estampados, recuerda que las rayas, cuadros o flores evocan la vida familiar y los hogares de antaño.

En esta propuesta de Very visten la cama y lo hacen en capas y sin que falte una buena colcha ni un cabecero tapizado. El zócalo alto en color burdeos, un tono cálido y hogareño, y los platos en la pared son dos buenos recursos decorativos. 

© Patrik Hagborg para Borästapeter

Papel pintado en una pared

Al igual que ocurre con la pintura, el papel pintado tiene la capacidad de transformar una estancia y aportar encanto y frescura. Además, resulta muy útil para ocultar imperfecciones de la pared, algo habitual en viviendas antiguas.

Pensamos en un diseño con motivos florales, pero también es idóneo un mural que reproduzca un paisaje. No se trata de empapelar toda la estancia, sino de colocarlo en una pared para que destaque y sea protagonista.

En este recibidor, el papel de Borästapeter imprime a la entrada de casa delicadeza y personalidad. Además, conecta con el jardín para que se cuele dentro. El perchero con balda inferior es otra buena idea para copiar, al igual que los cestos. Tampoco podemos pasar por alto el suelo blanco y negro. 

© La Redoute Interieurs

El exterior dentro de casa

Para que la decoración evoque a una casa de campo, es preciso que el jardín, con sus flores y flores plantas, pero también sus tijeras de cortar o la azada para mover la tierra, tenga un lugar de honor. Puedes incorporar centros y macetas en rincones como la repisa de la chimenea, la consola de la entrada o la mesa de comedor. No olvides que la cocina también agradecerá sus colores y fragancias. 

Esta propuesta de La Redoute Interieurs lleva el jardín dentro de casa mediante el arreglo floral, el cuadro con un jarrón con flores y el espejo con marco ratán, que pone también una nota natural a la estancia. 

© ¡HOLA! Prohibida la reproducción total o parcial de este reportaje y sus fotografías, aun citando su procedencia.