Durante estas semanas se ha hablado mucho del pelo de Kate Middleton. Sin pretenderlo, la esposa del príncipe Guillermo de Inglaterra ha desatado un debate por los cambios de su melena en sus últimos actos oficiales. Y es que la Princesa de Gales, que siempre va impecable, ha lucido en algunas ocasiones unos reflejos más claros con destellos dorados, mientras que en otras su cabello parecía volver a un castaño más oscuro y clásico.
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La historia ha vuelto a repetirse en su última aparición pública, donde Kate ha protagonizado estas imágenes. Una vez más, su pelo se convirtió en tema de conversación, dando lugar a un sinfín de comentarios en medios y redes sociales por este "juego" de matices. Sin embargo, la explicación es mucho más sencilla y no tiene nada que ver con todo lo que se ha dicho. Así nos lo asegura la reconocida estilista María Baras: "Me parecen muy curiosas estas fotos, precisamente por todo lo que se ha estado hablando de su color de pelo durante estos últimos días: que si es rubio, que si es castaño... Pues estas imágenes demuestran cómo puede cambiar el pelo en un mismo acto, dependiendo de si se hacen en interior o en exterior".
Tal y como apunta la directora creativa de Cheska, al llegar a la Escuela Infantil Farnborough Road, en el pueblo de Birkdale (Southport, Inglaterra), pudimos verla con una espectacular melena rubia XXL, sin embargo, en las fotos del interior se ve claramente su cabello mucho más oscuro.
"Se ha hablado tanto de su color de pelo, que si un día lo llevaba de un color, otro de otro... pero lo que hay que enfatizar es que el color del cabello cambia con la luz. Muchas veces se especula y se dicen cosas, pero el cambio es realmente la luz. Ella no se ha podido cambiar el pelo de un momento a otro, lo que cambia es la luz y hay una gran diferencia a ver las fotos en interior a las que están hechas al exterior, con la luz del día", afirma María Baras.
Lo mismo sucedió hace unos días durante la visita de los Donald y Melania Trump a Reino Unido. Después de verla en diferentes actos con el cabello más oscuro, Kate reapareció con un tono muy claro que llamó especialmente la atención. "Fuera, con la luz del sol se ve un rubio caramelo, pero dentro sí que se ve un tono bronce, como un castaño que va más hacia un rubio", dice la estilista analizando su look para su cita con los scouts en Frogmore Gardens.
María ve una clara evolución del estilo capilar de la Princesa hasta llegar a la supermelena que lleva ahora, y afirma: "Kate ha ido poco a poco aclarándose el cabello y ha aprovechado las vacaciones de verano, que normalmente se aclara mucho más el pelo, para matizárselo, dejándolo más claro, más rubio caramelo".
"Antes lo que llevaba era un bronde que partía de una base chocolate, un castaño iluminado con reflejos, con ese efecto degradé en un tono miel, pero ahora ya parte de una base que es más clara, parte de una base rubio oscuro y lleva tonos muy dorados. Katie tiene una melena tridimensional llena de contrastes que yo creo que le viene muy bien porque, como ahora tiene el pelo más largo, si no se ve como muy bloque. La veo muy favorecida con estos cambios", afirma.
"Después de toda la vida con el pelo castaño, es muy normal que con la edad empiecen a aparecer las canas y las mujeres aclaren su pelo para no tener que ser tan 'esclavas'. Al cambiar su base de un castaño a un rubio oscuro, se camuflan muchísimo mejor. En su caso, además, le aporta mucha calidez. Es un tono muy otoñal, muy fresco... Yo la encuentro, como siempre, divina. Está guapísima y la verdad es que lo luce siempre con esa fuerza, esa energía y esa sonrisa maravillosa que le caracteriza", conluye la directora creativa de Cheska