¿Te imaginas despertarte, pasar el cepillo por tu pelo y estar lista para salir? Pues sí, es posible. Hoy más que nunca, la comodidad se ha vuelto una prioridad, y eso también aplica a nuestro look. Nos despedimos del drama de la plancha y el secador para darle la bienvenida a cortes que trabajan a nuestro favor, incluso cuando apenas tenemos tiempo o ganas de peinarnos.
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Estilos pensados para fluir con la textura natural del cabello, adaptarse a la forma del rostro y, lo mejor de todo, hacerte lucir increíble con el mínimo esfuerzo. Ya sea que tengas el pelo liso, ondulado, rizado o fino, hay un look perfecto para ti que no necesita herramientas de calor. En esta lista te mostramos 12 cortes de pelo que ahorran tiempo sin recurrir al calor ni renunciar al estilo.
El bob texturizado es ese corte ideal si quieres un look fresco, moderno y que prácticamente se peina solo. Se lleva por debajo de la mandíbula y con capas sutiles que aportan movimiento. La textura natural del cabello, ya sea ligeramente ondulada o con algo de volumen, se vuelve protagonista sin necesidad de moldeado. Lo genial es que no busca la perfección: un poco despeinado es justo lo que lo hace tan chic.
Si hay un corte que grita personalidad sin complicaciones, es el shag corto. Este estilo, heredado de los años 70, combina capas marcadas con un aire desenfadado que favorece tanto a melenas lisas como onduladas. El flequillo abierto o tipo cortina es el complemento perfecto para equilibrar el rostro y darle ese aire rockero tan atractivo. No requiere cepillado ni alisado: cuanto más natural se vea, mejor.
Este corte es pura tendencia por una buena razón: combina el glamour del volumen con la comodidad de un corte inteligente. Se trata de capas largas que enmarcan el rostro y otras más cortas que añaden cuerpo en la parte superior, creando un efecto ligero que favorece a todo tipo de cabellos. No necesita moldeado, porque al secarse al natural, las capas ya hacen el trabajo de crear forma y movimiento.
El pixie con capas es el corte corto por excelencia para las amantes de la practicidad. Aunque pueda parecer atrevido, es un estilo ultra favorecedor que enmarca el rostro y destaca los rasgos. Las capas aportan textura y evitan que el cabello quede pegado al cuero cabelludo. Basta con pasar los dedos, aplicar un poco de producto (opcional), y tendrás un look definido, con carácter y completamente libre de planchas.
Este corte a la altura de los hombros es uno de los más versátiles que existen. Las puntas desfiladas le quitan peso al cabello y permiten que se acomode con suavidad, sin necesidad de herramientas térmicas. Es ideal para cabello liso u ondulado, y se adapta perfectamente a distintos tipos de rostro. Al secarse al natural, las capas ligeras crean un efecto aireado y con movimiento, aunque no hayas hecho absolutamente nada.
El long bob es la versión más larga del clásico bob, pero su versión con capas invisibles es aún más especial. Estas capas no se ven a simple vista, pero ayudan a distribuir el volumen, evitar el efecto bloque y hacer que el cabello caiga con gracia. El resultado: una melena con movimiento que se acomoda sola al secarse al aire. Es perfecto para quienes quieren un look pulido, pero sin peinarse todos los días.
Sinónimo de la elegancia minimalista y del poder del “menos es más”. Inspirado en la estética francesa, este estilo ultracorto abraza la forma natural del cabello, resaltando el rostro con un aire sofisticado y andrógino que nunca pasa de moda. Es ideal para cabellos lisos o ligeramente ondulados, ya que al tener un largo muy controlado, prácticamente se seca solo y queda impecable sin necesidad de calor.
Olvídate del corte redondo sin forma: la versión actual del bowl cut se reinventa con capas internas, texturas ligeras y flequillos versátiles. Es ideal para cabellos lisos y gruesos, y tiene ese aire artístico que no necesita ni un segundo frente al espejo. Un poco de producto o simplemente el movimiento de tu cabeza será suficiente para darle forma. Esaudaz, divertido y muy fácil de llevar.
Si tu pelo tiene una ligera onda natural, esta opción es tu mejor aliada. La melena desfilada consiste en cortar de forma estratégica algunas capas largas que eliminan el peso innecesario, permitiendo que las ondas se marquen por sí solas al secar. El resultado es un look boho, relajado y con movimiento, que no pide peinados elaborados ni productos sofisticados.
El cabello afro tiene una belleza única y poderosa, y cuando se corta con la forma adecuada, no necesita absolutamente nada más. Un buen corte en forma redondeada o en capas puede hacer que el volumen se distribuya de forma armoniosa, resaltando la textura natural sin encoger demasiado ni crear peso en la raíz. Es puro empoderamiento natural, sin calor y sin complicaciones.
El mini bob es una versión más corta del bob clásico, que llega justo debajo de las orejas. Tiene un aire retro que recuerda a las divas del cine francés, pero con un toque actual y desenfadado. Funciona especialmente bien en rostros pequeños o cuellos largos, ya que realza la estructura facial. Lo mejor es que, al ser tan corto, se seca rápido y mantiene su forma sin necesidad de peinarlo.
La melena recta con raya al medio es la definición de elegancia natural. Aunque a primera vista parece simple, lo cierto es que este corte necesita muy poco para verse bien. Su secreto está en la precisión del corte: al mantener los extremos bien nivelados, el cabello cae con un peso queelimina el encrespamiento y evita el volumen no deseado. La raya al medio aporta simetría al rostro y alarga visualmente las facciones.
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