En época celebraciones... si la ficción española de este 2025 fuera un cóctel, tendría un chorrito de misterio, un toque de humor chispeante e irreverente, una pizca de drama y unas gotitas de un ingrediente secreto que no sabes qué es pero que no puedes dejar de probar. Cada serie sirve su propia receta de sorpresa y entretenimiento y en este repaso hacemos un recorrido por las producciones nacionales que han marcado estos doce meses, dejando claro que ya no necesitamos recurrir a Hollywood para ver grandes historias: lo que se cocina en casa sabe —y se ve— mejor que nunca.
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El jardinero (Netflix)
Con una mezcla de thriller, humor negro y un romance inesperado, se ha convertido en una de las series españolas más vistas de Netflix este año a nivel mundial y lo cierto es que argumentos no le faltan. La historia sigue a Elmer (Álvaro Rico), un joven criado bajo el control absoluto de su madre, China Jurado (Cecilia Suárez), que dirige un vivero que oculta un negocio clandestino de asesinatos por encargo. Un accidente en su infancia le dejó sin capacidad para sentir emociones, lo que lo convierte en un asesino eficaz… hasta que algo cambia. Su nueva víctima es Violeta (Catalina Sopelana), una dulce maestra de guardería, y enamorarse de ella complica aún más las cosas cuando su madre quiere eliminarla. Una serie insólita, adictiva y con giros que no te darán tregua durante seis adictivos capítulos.
Poquita fe - Temporada 2 (Movistar Plus+)
La segunda temporada de Poquita Fe ha vuelto a demostrar por qué es una de las comedias más celebradas de 2025. Tres meses después, la crisis de pareja de Berta (Raúl Cimas) y José Ramón (Esperanza Pedreño) sigue sin resolverse y, por si eso fuera poco, pierden el piso. Su solución de emergencia —y una idea muy poco acertada—: mudarse con los padres de ella… y con la cuñada “perfecta”, que también se ha quedado sin casa. Si a eso le sumas al vecino siempre al acecho, las andanzas de Pilar tras volver de Tailandia y alguna que otra catástrofe más... el resultado es más caos cotidiano, más risas y más situaciones absurdas en las que nos vemos reflejados al instante. Convivir con la familia, política o propia, es toda una prueba de fuego y ya hemos visto que nuestros protagonistas no son muy buenos para este tipo de retos. La serie engancha tanto que incluso la reina Letizia se cuenta entre sus fans.
Mariliendre (Atresplayer)
Si lo tuyo es cantar a pleno pulmón y dejarte llevar por la nostalgia, esta es tu serie. Mariliendre es la primera ficción musical de Atresplayer y lleva el inconfundible sello de los Javis como productores en su última producción antes de su ruptura sentimental. Su protagonista, Meri Román, fue una auténtica diva de la noche gay madrileña, pero ahora, con 35 años, vive atrapada entre un pasado glorioso y un presente que no la representa. La muerte de su padre lo cambia todo: se reencuentra con su séquito de amigos gays, revive momentos inolvidables y, entre temazos y emociones a flor de piel, intenta redefinir su vida y su identidad. Una historia vibrante, honesta y muy pop que te hará reír, llorar y, sí, bailar sin cesar.
La vida breve (Movistar Plus+)
Esta serie de época, con una mirada divertida y descarada, recrea el reinado más corto de la historia de España: el de Luis I (Carlos Scholz) , hijo de Felipe V. Apenas duró 229 días, entre enero y agosto de 1724, pero dio para una sucesión de intrigas palaciegas, enredos familiares y decisiones precipitadas que marcaron su breve paso por el trono. Como cualquier joven, Luisn está a punto de experimentar grandes cambios: le casan con una prima desconocida y va a heredar el trono. Tratándose del siglo XVIII esto sería un episodio feliz en la vida de cualquier heredero, pero a él no se lo van a poner fácil. Tiene que iniciar su reinado con una esposa rebelde (Luisa de Orleans, interpretada por Alicia Armenteros), un padre enajenado (Felipe V, al que da vida Javier Gutiérrez) y una madrastra conspiradora (Isabel de Farnesio, encarnada por Leonor Watling). Aunque, por suerte para él, sus problemas terminarán pronto.
A muerte (Atresplayer / Prime Video / Apple TV / Movistar Plus+)
Un trabajo especialmente emocionante, tanto por su argumento como por lo que representa: la última serie que Verónica Echegui estrenó en vida —Ciudad de sombras se lanzaba póstumamente el 12 de diciembre—. En esta comedia dramática dirigida por Dani de la Orden, la actriz madrileña interpreta a Marta, una creativa publicitaria que, tras quedarse embarazada, duda sobre su futuro como madre y de si quiere seguir adelante con la gestación. Paralelamente, se reencuentra con Raúl (Joan Amargós), diagnosticado con un cáncer terminal, con el que conecta profundamente. La ficción invita a reflexionar sobre la vida, la muerte y los pequeños momentos que hacen que todo valga la pena, dejando una huella especial con la actuación de la actriz madrileña que perdurará en la memoria de los espectadores para siempre.
Furia (Prime Video)
Carmen Machi, Candela Peña, Cecilia Roth, Nathalie Poza y Pilar Castro dan vida a cinco mujeres muy distintas, pero unidas por un denominador común: han llegado al límite. Ante extorsiones, engaños o la dureza de la exclusión social, sus decisiones desatan una cadena de consecuencias inesperadas. Entre ellas hay una artista abandonada por su marido, una cocinera hundida por una crítica negativa, una dependienta atrapada en la precariedad, una madre al borde del desahucio y una antigua estrella del cine erótico con una oferta que lo cambia todo. Furia entrelaza estas vidas como piezas de dominó y dibuja un retrato mordaz y realista del presente, con ironía, tensión y actuaciones que atrapan desde el primer instante. Es una de las grandes triunfadoras del año y ya prepara segunda temporada… ¿necesitas más excusas para verla?
Animal (Netflix)
En esta serie, una de las revelaciones de 2025, Luis Zahera se pasa a la comedia para dar vida a Antón, un veterinario rural gallego que, ante la crisis del campo, se queda sin clientes ni futuro. Su única opción pasar por aceptar el inesperado ofrecimiento de su sobrina Uxía (Lucía Caraballo), directora de una tienda boutique para mascotas en plena ciudad, más parecida a un spa o un supermercado gourmet que a una clínica para animales. Lo que empieza como una solución temporal se convierte en un auténtico choque de mundos donde el protagonista deberá lidiar con perros mimados, hámsters con ansiedad y dueños con más pulgas que sus mascotas. Una comedia con humor, ternura y ese punto de locura que nace cuando el sentido común rural se enfrenta a la extravagancia urbana.
Manual para señoritas (Netflix)
Madrid, 1880. Elena Bianda es la dama de compañía más solicitada de la ciudad. Su secreto se basa en un delicado equilibrio entre la estricta moralidad con las familias y la sensibilidad hacia las preocupaciones de las jóvenes a su cargo. Ha acompañado a más de veinte chicas hacia un noviazgo y cortejo decentes y su vida gira en torno a verlas pasar con éxito por el altar. Todo cambia cuando llega a casa de los Mencía para hacerse cargo de tres hermanas y descubre que mantener el control no siempre es tan sencillo como parece. Una comedia romántica de época protagonizada por Nadia de Santiago, Álvaro Mel, Isa Montalbán y Zoe Bonafonte, con el sello de las creadoras de Las chicas del cable y Velvet que enamoró a la audiencia desde su llegada en el mes de marzo.
El cuco de cristal (Netflix)
La esperadísima adaptación del bestseller de Javier Castillo, como no podía ser de otra manera, es una de las producciones más destacadas de estos doces meses. En ella, Clara Merlo (Catalina Sopelana), médico residente de primer año, sobrevive a un infarto gracias a un trasplante de corazón. Durante su recuperación, un impulso la empuja a descubrir quién era el joven al que pertenecía el órgano que ahora late en su pecho. Su investigación la lleva a un pequeño y enigmático pueblo. Su llegada al lugar coincide con la desaparición de un bebé, lo que desentierra antiguos secretos y misterios enterrados durante décadas que no te dejarán despegar la vista de la pantalla.
Yakarta (Movistar Plus+)
Joserra Garrido (Javier Cámara) fue jugador olímpico de bádminton, pero ahora, divorciado y sin ilusiones, da clases de educación física en un instituto de Vallecas. Todo cambia cuando cree descubrir en Mar (Carla Quílez), una joven alumna con talento para el deporte, la oportunidad de volver a brillar en Yakarta, donde los exjugadores como él son tratados como héroes. Pero el viaje se presenta de todo menos fácil: pensiones destartaladas, polideportivos en horas bajas y estaciones de servicio por media España les esperan antes de llegar a Indonesia… si es que llegan. Un homenaje a toda esa gente que pierde incluso cuando gana, con dos maravillosos protagonistas que comparten la herida del abandono, del fracaso y de no tener a dónde ir.
Anatomía de un instante (Movistar Plus+)
Esta ficción reconstruye el golpe de Estado del 23-F desde una mirada íntima y política a partir de la novela de Javier Cercas. La serie se detiene en uno de los momentos más decisivos de la Transición: la entrada del teniente coronel Antonio Tejero (David Lorente) en el Congreso de los Diputados, pistola en mano. Mientras el hemiciclo se sumerge en el caos, solo tres figuras permanecen sentadas en sus escaños —Adolfo Suárez (Álvaro Morte), Santiago Carrillo (Eduard Fernández) y Gutiérrez Mellado (Manolo Solo)—, un gesto que sirve para explorar el miedo, el poder y la fragilidad de la democracia en un país que aún estaba aprendiendo a serlo.
Su majestad (Prime Video)
España, año 2024. Un escándalo sacude a la Casa Real y obliga al rey Alfonso XIV (Pablo Dergui) a apartarse de la primera línea pública durante unos meses. La consecuencia es inmediata e inesperada: su hija Pilar (Anna Castillo), joven princesa y futura reina, se ve al frente de la institución sin preparación ni ganas aparentes. Para la opinión pública, es una heredera irresponsable, insolente, vaga y bastante inútil y lo cierto es que ella misma no hace demasiado por desmentirlo. Desde ahí, Su Majestad construye una comedia descarada e irreverente que juega con la sátira política, el humor incómodo y una protagonista que tiene que demostrar que quizá la gente está equivocada con lo que piensa sobre ella...el problema es que igual tienen razón.