La familia Flores es una de las sagas de artistas más emblemáticas de nuestro país y su impacto en la cultura es innegable. Generación tras generación donde el arte corre por sus venas, ya sea guitarra en mano o encima de las tablas. Los nietos de Lola Flores y Antonio González, 'El Pescailla', continuan la inquebrantable estela que comenzó con 'La Faraona' y que continuaron sus padres: Lolita, Antonio y Rosario. Si bien tratan de mantenerse al margen de los focos, su presencia mediática es innegable y, con el emotivo documental Flores para Antonio, el clan Flores vuelve a acaparar titulares y portadas de revista demostrando el mismo mensaje de siempre: la familia es lo más importante. Tanto es así que, incluso, las rutinas que tenían consolidadas han cambiado gracias a los más pequeños de la casa, tal y como confesaba Lolita.
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Durante una entrevista con Julia Otero para su programa Julia en la Onda, la primogénita de 'La Faraona' y 'El Pescailla' confesaba que su descontento con madrugar tenía que ser aplazado cuando compartía tiempo con sus dos grandes amores: sus dos nietos. "Ahora estoy madrugando más, yo no sé si es porque este verano he estado con mis nietos y ellos se levantan a las 7:30 y claro, la abuela también", compartía divertida, aunque subrayando que no quería acostumbrarse para "recuperar mi buen ritmo biológico y levantarme a las 11:00 o 12:00".
La ganadora del Premio Goya a la Mejor Actriz Revelación en el año 2003 por su papel en Rencor ha explicado en más de una ocasión que, a pesar de tener que levantarse temprano, le encanta que Noah y Nala, los hijos de Elena Furiase y Gonzalo Sierra, se queden a dormir con ella y así pasar divertidas y extensas jornadas repletas de juegos, caos y música. Para Lolita, sus nietos son "mi fuente de energía", tal y como confesaba durante el cumpleaños de la pequeña de la familia.
"Hacerme 'Abuela lolita, ta' como tú me llamas, me vuelve loca", continuaba en esa misma felicitación, subrayando que sentía felicidad plena cuando estaba con ella y con su hermano: "Me muero contigo". Han sido numerosas las ocasiones en las que Lolita ha declarado su profundo amor por sus nietos. "Gracias al universo por darme estos momentos (...) Siempre me dan fuerza para seguir. Los adoro con mis 5 sentidos. Mi Noah y mi Nala", compartía en redes sociales tras una tarde de juegos.
Ha modificado su casa por ellos
Lolita estaba acostumbrada a vivir a las afueras de la capital, acompañada de la tranquilidad de La Moraleja. Sin embargo, el bullicio del centro de Madrid y su gran oferta cultural le hicieron cambiar de ritmo de vida y, desde hace aproximadamente una década, vive en el Paseo de la Castellana. Su hogar, repleto de recuerdos, ha pasado a ser el epicentro de los juegos de sus nietos.
El salón, por ejemplo, ha sido convertido en una increíble zona de juegos y, en el gran ventanal con vistas a la emblemática avenida, ha colocado junto a numerosos juguetes una cálida alfombra que invita a disfrutar de una tarde de diversión.
Van a verla al teatro
Actualmente, Lolita está bajo las órdenes de Luis Luque en Poncia, donde se narra la historia de la criada de La Casa de Bernarda Alba, la divertida obra de Federico García Lorca. La primogénita de la saga de artistas es la protagonista de la emocionante obra que podrá ser vista en el Teatro Bellas Artes de Madrid hasta el 15 de febrero. Un papel de lo más especial, teniendo en cuenta la pasión de su madre por el poeta y dramaturgo granadino.
A la intérprete le encanta estar sobre las tablas y, durante una de sus actuaciones, tuvo el apoyo más especial: el de sus nietos. Lolita ha explicado en varias ocasiones que, cuando el mayor de los hijos de Elena la vio por primera vez sobre el escenario, reaccionó bastante sorprendido. "Noah se asustó al verme detrás de la cortina antes de empezar la función", recordaba divertida.
Una estrecha relación con sus hijos
La intérprete de exitosos temas como Amor, amor o No renunciaré ha confesado en más de una ocasión el especial vínculo que tiene con sus dos hijos, Elena y Guillermo. "Soy su madre, pero soy su amiga, y hacen conmigo lo que quieren. Me río mucho con ellos y ellos conmigo. Para mí siguen siendo pequeños", explicaba en una entrevista reciente. Como ha declarado en más de una ocasión, el papelazo de su vida siempre será el de madre (y el de abuela).
"¿Cómo se puede querer tanto a estos nietos míos? Me habéis hecho una mujer distinta. Mi amor por ellos es infinito, igual que el que le tengo a mis hijos Elena y Guillermo, y a ti, mi yerno, que te adoro. Gracias al universo y gracias a Dios. Solo quiero salud y felicidad en sus caminos. Os quiero", escribía en otro post, declarando su cariño a toda su familia.