Nicole Kidman vuelve a hacerlo. La actriz, que en los últimos años se ha convertido en toda una reina del thriller gracias a títulos como Big Little Lies, The Undoing o Nine Perfect Strangers, regresa ahora con un papel que promete ponernos los pelos de punta. Prime Video estrena Scarpetta, su nueva apuesta criminal, y las primeras imágenes ya dejan claro que la intérprete australiana está lista para sumergirse en uno de sus registros más oscuros. Nada de alfombras rojas ni glamour hollywoodiense: aquí manda la bata de forense, el pulso frío y un misterio que parece escrito para ella. Y sí, prepárate, porque su vuelta al género será tu nueva obsesión de 2026.
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Kidman se mete en la piel de Kay Scarpetta, la icónica médico forense de las novelas creadas por Patricia Cornwell que, tras vender más de 120 millones de copias en todo el mundo, llega por primera vez a la pequeña pantalla. Scarpetta, que aterrizará en Prime Video el próximo 11 de marzo, consta de ocho episodios y promete ponernos al borde del asiento. Y no es para menos, porque la propia Nicole ha confesado a Vanity Fair que la adaptación la ponía nerviosa hasta el punto de que solo leer el guion le resultaba inquietante.
La serie se adentra en la vida de Kay a lo largo de dos líneas temporales: sus primeros años como jefa de medicina forense a finales de los noventa y la actualidad, cuando regresa a su ciudad natal en Virginia para investigar un espeluznante asesinato. Perfeccionista y adicta al trabajo, su determinación va más allá de estudiar los cuerpos para descubrir qué les sucedió, también lucha por hacer justicia, servir como voz de las víctimas y desenmascarar a un asesino en serie que marcó su carrera hace 28 años y que aún hoy amenaza con poner patas arriba su vida profesional y personal. Más allá de los crímenes, Scarpetta explora la psicología de culpables e investigadores, mostrando las heridas emocionales y los complejos dilemas a los que se enfrentan quienes persiguen la verdad.
Ambientada en el contexto de la investigación forense moderna, engancha tanto por los casos policiales como por las relaciones personales que rodean al personaje de Kidman. Entre cadáveres y complejas investigaciones, también tendrá que lidiar con el complicado vínculo que tiene con su hermana mayor Dorothy Farinelli, interpretada por Jamie Lee Curtis, marcado por rencores y secretos del pasado aún por descubrir. Además, se enfrentará a viejas tensiones profesionales y personales que podrían destruir todo lo que ha construido. La serie combina misterio, intriga y humanidad, ofreciendo un thriller adictivo que muestra tanto la complejidad de los crímenes como el lado emocional de sus protagonistas.
Un elenco de altura
Junto a Kidman y Curtis —que además de protagonistas ejercen como productoras— completan el reparto Bobby Cannavale, ganador del Emmy por Will & Grace, como el detective Pete Marino; Simon Baker (El mentalista) como el perfilador criminal del FBI Benton Wesley; y Ariana DeBose, ganadora de un Oscar por West Side Story, como Lucy Watson, la sobrina experta en tecnología de Kay.
También se unen al elenco Rosy McEwen (Blue Jean), Amanda Righetti (El mentalista), Jake Cannavale (Infiltrado en la mafia) y Hunter Parrish (17 otra vez), quienes dan vida a las versiones jóvenes de los personajes de Kidman, Curtis, Cannavale y Baker, respectivamente, en la línea temporal de los años noventa. Además, Charlie B. Foster, hijo de Jodie Foster, aparece en cuatro capítulos en el papel de Wingo, un asistente de la morgue. Todos ellos se suman a una escalofriante historia que ya tiene confirmada una segunda temporada y que apunta a convertirse en una de las series estrella de 2026.
