El bautizo de Nicolás, el tercer hijo en común de Fran Rivera y Lourdes Montes, será una celebración íntima, reservada exclusivamente para los familiares y amigos más cercanos. Ante un evento tan especial, surge la eterna pregunta: ¿asistirá Cayetano Rivera? La respuesta, por parte de su entorno, es clara: "Por supuesto que está invitado". Sin embargo, es probable que Cayetano no acuda a la iglesia, solo a la celebración posterior, que tendrá lugar en la Hacienda Santa Eufemia, ya que actualmente se encuentra en una etapa en la que prefiere mantener un perfil bajo. Incluso podría no sentirse cómodo ante la presencia de las cámaras que se congregarán en la puerta de la iglesia de Santa Ana tras los recientes acontecimientos que han rodeado su vida, el accidente de tráfico que sufrió el pasado 9 de noviembre
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A pesar de los rumores constantes de distanciamiento, los hermanos Rivera siguen siendo una pieza fundamental el uno para el otro. De hecho, "su relación está mejor que hace mucho tiempo", nos cuentan. Un claro ejemplo de ello es el apoyo incondicional que Fran brindó a Cayetano tras su accidente de tráfico. El primogénito de Paquirri y Carmina no dudó en estar a su lado, mostrando su preocupación. Fue fotografiado saliendo de la casa de su hermano en Sevilla, donde Cayetano se refugió tras el siniestro. "Lo importante es que no ha pasado nada y que no ha habido daños a nadie", aseguró Fran.
La relación entre Fran y Cayetano se enfrió a raíz de la Goyesca de Ronda de 2019. El motivo de la disputa, al parecer, fue la decisión de Fran, como gestor de la plaza, de adelantar la fecha del evento al 31 de agosto, una modificación que generó cierto malestar en Cayetano. Pese ello, su unión es indestructible. "A veces nos llevamos mejor, otras peor; unas veces nos peleamos, otras no. Seguimos adelante. Sí, le llamo y él me llama... No somos Caín y Abel, pero tampoco los hermanos Marx", explicó Fran en el programa De viernes de Telecinco. Además, dejó claro que, por encima de todo, están sus hijos. "Queremos que los primos se vean, es importante".
Actualmente, Cayetano está atravesando una etapa muy complicada, una fase común a todos los toreros que dejan atrás una profesión tan absorbente, que ocupa por completo sus vidas. El pasado 20 de septiembre, con tan solo 48 años, se retiró de los ruedos tras 20 temporadas de alternativa. Esta 'jubilación' tan prematura le habría dejado una sensación de vacío después de haber dedicado los mejores años de su vida al toro.
En este momento, Cayetano cuenta con el apoyo incondicional de su hermano Fran, quien ya vivió una situación similar cuando dejó definitivamente los ruedos en 2017. Lourdes Montes recordaba esa etapa de su marido en ¡HOLA! con total sinceridad. "La verdad es que estoy perdida, no lo sé. Me da miedo que no sepa acostumbrarse a la monotonía. Creo que va a echar de menos ponerse metas. Siempre se esforzaba por la ilusión de un día concreto, de una cita en una plaza. Ahora tendrá que buscarse otras ilusiones", decía, visiblemente preocupada.
Fran siempre ha sido un faro en la vida de su familia. "A mí nadie me obligó a hacerme cargo de mi familia. Cuando conseguí mi sueño de ser torero, y conseguí un estatus importante en el toreo, vi que podía y que hacía falta, y dije: 'Aquí estoy yo'. Estoy orgulloso de haberlo hecho, con mi madre, mis hermanos, mi tía, mi prima, mi abuelo... Es algo de lo que me siento orgulloso", afirmó.
El torero estuvo para todos y asumió sin dudarlo los gastos académicos de Cayetano en Estados Unidos, un gesto de generosidad que su hermano lleva grabado en la memoria. "Cayetano no solo me ha dado las gracias, sino que además, cuando triunfó en el toreo, me dijo: '¿Cuánto te costé yo en Estados Unidos? Pues toma", desveló Fran. "¡Qué maravilla!", añadió con satisfacción.
Por eso el vínculo entre estos dos hermanos es indestructible, aunque la vida a veces les haya separado temporalmente. El amor, el cariño, el respeto y la admiración mutua siempre prevalecen por encima de todo.