La inesperada muerte de Diane Keaton ha causado una gran conmoción en todo el mundo. La estrella de Annie Hall falleció a los 79 años después de un repentino y rápido deterioro físico. La actriz, madre de dos hijos, deja un asombroso patrimonio neto de 100 millones de dólares (86,5 millones de euros) entre sus seres queridos. La ganadora del Oscar no solo protagonizó algunas de las películas más populares de Hollywood, como la trilogía de El padrino, El padre de la novia o El club de las primeras esposas, también fue una experta en bienes raíces, especializada en restaurar casas históricas.
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Keaton era gran amante de la arquitectura y el diseño, especialmente de los estilos colonial español y del renacimiento de mediados de siglo. Varias de sus propiedades fueron vendidas a otras celebridades, según Celebrity Net Worth, incluyendo una mansión centenaria que compró en 2007 por 8,1 millones de dólares (millones de euros), y tres años después, se la vendió al productor de American Horror Story, Ryan Murphy, por 10 millones de dólares (8,6 millones de euros).
La estrella de Cuando menos te lo esperas se dedicó a comprar casas y a acometer una serie de reformas para luego venderlas. Así lo hizo con una casa en Bel Air, que acabó vendiéndola a un ejecutivo tecnológico por la inestimable cifra de 16,5 millones de dólares (14,25 millones de euros) en 2005. También hizo lo propio con una propiedad que adquirió en Laguna Beach por 7,5 millones en 2002, la renovó y luego vendió solo dos años después por 12,75 millones. Era una gran experta en este tipo de negocios. A estas propiedades se unieron otras como la de Pacific Palisades, de las que sacó una alta rentabilidad.
En 2017, Keaton volcó su experiencia y gusto en el libro The House That Pinterest Built, una obra descrita como guía de estilo y fuente de inspiración para amantes del diseño. En él, la actriz narra cómo Pinterest fue su inspiración a la hora de diseñar su propio hogar, siguiendo el consejo de la cineasta Nancy Meyers. El libro combina fotografías, planos, consejos y anécdotas, animando al lector a dejarse llevar por la creatividad digital a la hora de soñar y construir el hogar perfecto.
Keaton falleció el pasado 11 de octubre y no han trascendido las causas de su muerte. Ella solía pasear junto a su perrito por las inmediaciones de su casa con su aspecto habitual de sombrero y gafas de sol, pero dejó de hacerlo en el mes de marzo. Entonces puso en venta la casa de sus sueños en Los Ángeles por 29 millones de dólares (25 millones de euros), el hogar en el que había decidido pasar el resto de sus días. Y según fuentes cercanas, el fallecimiento de la actriz resultó del todo "inesperado", "su declive fue muy repentino, lo cual fue desgarrador para todos sus seres queridos" y "ni siquiera sus amigos de toda la vida estaban completamente al tanto de lo que estaba sucediendo".
Con su muerte, la actriz deja atrás a sus dos hijos adoptivos, con los que siempre mantuvo muy buena relación y son previsiblemente los que heredarán su inmensa fortuna, a la espera de que pueda abrirse el testamento. Después de cumplir los 50 años, la actriz adoptó a Dexter, en 1996, y Duke Keaton, en 2001. Dexter Keaton, tiene 29 años y está casada con Jordan White, una boda de la que su madre fue testigo, y Duke, que nació en febrero de 2000, que ha seguido los pasos de su madre en el mundo del espectáculo, pero no en el terreno de la interpretación, sino en el de la música. Tras publicar su primer single, su orgullosa madre solía compartir algunos vídeos de él dando rienda suelta a su gran pasión.