La crisis de Brooklyn y Nicola Peltz con los Beckham es una de las polémicas del año. Durante 25 años, el futbolista, la diseñadora y sus cuatro hijos han demostrado que son una piña, pero todo ha cambiado entre ellos. Han dejado de ser una familia idílica para convertirse en una familia en la que las riñas están a la orden del día. Además, el paso del tiempo no está ayudando a que las aguas se calmen. Todo lo contrario. La brecha no deja de agrandarse y ha habido varios puntos álgidos que invitan a pensar que la situación es insalvable. Cada uno de sus pasos son analizados al detalle desde que saltaran los primeros rumores y los protagonistas de la trama apuestan por el silencio... O mejor dicho, apostaban. Y es que Brooklyn ha dado un paso al frente pronunciándose acerca de esta nueva etapa.
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El emprendedor, que tiene su propia línea de salsas picantes premium, ha sido uno de los participantes del partido All-Star de la Ryder Cup, celebrado en Bethpage Black. "Me han dado una paliza, pero en cierto modo me lo esperaba. Estando en Nueva York, compitiendo contra Eli... se reían. Pero es lo que es, me lo estaba pasando bien. He hecho lo mejor que he podido. La verdad es que ha sido divertidísimo", relataba con sentido del humor sobre su paso por la competición de golf, dividida en cuatro partidos. En la cita, formó equipo con otras estrellas como Pau Gasol, Catherine Zeta-Jones, Toni Kukoč, el chef José Andrés, Tom Felton y Oliver Phelps, estos dos últimos conocidos por sus papeles en Harry Potter. El equipo de Europa se ha enfrentado al de Estados Unidos, compuesto por John McEnroe, Eli Manning, Michael Strahan y el chef Bobby Flay, entre otros.
En el partido, que tuvo una gran repercusión, el hijo mayor de los Beckham explicó a Daily Mail que se mantiene al margen del interés que despierta su vida personal, especialmente en los últimos meses. "Todo el mundo siempre va a decir tonterías. Simplemente intento hacer esto, jugar al golf con amigos. Es muy divertido", confesó sin querer hacer referencia a la distancia emocional con sus padres y hermanos. Eso sí, dejó claro que su absoluta prioridad es Nicola Peltz, con la que contrajo matrimonio en abril de 2022 y con la que renovó los votos este mismo verano en una ceremonia a la que no asistió ninguno de sus familiares. "Siempre habrá gente que diga cosas negativas, pero tengo una esposa que me apoya mucho. Ella y yo hacemos lo nuestro, nos concentramos y trabajamos. Y somos felices", zanjó.
Su presencia en Nueva York, con cambio de look incluido, daba pie a pensar en un posible acercamiento porque al día siguiente de la competición jugaba allí el Inter Miami, equipo de su padre en el que están Leo Messi, Jordi Alba, Luis Suárez y el recién llegado Rodrigo De Paul. Pero Brooklyn se adelantó a las especulaciones contando que su visita a la Gran Manzana era exprés. "Tengo que volver a Los Ángeles. Dejé a mi esposa sola con nuestros cuatro perros, así que tengo que volver a ayudar y volver al trabajo". Nicola está teniendo un comienzo de curso muy intenso con varias campañas de moda. Además, espera con ilusión el estreno de la película Pretty Ugly, que llega tras debutar como directora en Lola.