Dicen que la cara es el espejo del alma y, viendo estas imágenes de Cayetano Rivera, podemos afirmar que, tras unos meses muy tormentosos, por fin ha llegado la calma a su vida. El diestro, de 48 años, fue fotografiado así de sonriente tras su esperado regreso a los ruedos en Tomelloso, Ciudad Real, en una plaza de especial significado para él, pues fue su padre, Paquirri, quien la inauguró en 1972.
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Cayetano viajaba en la parte trasera del coche, en el asiento central, junto a dos amigos, uno de ellos el conductor y otro en el asiento del copiloto. Las únicas palabras que pronunció horas antes de cortar 3 orejas y salir por la puerta grande fueron: "Muy contento".
A estas imágenes que reflejan su felicidad se suma otra instantánea tomada la víspera de su esperada reaparición. El torero se alojó el sábado por la noche en Tomelloso y salió a cenar a uno de los restaurantes más conocidos del municipio manchego, la pizzería Marquinetti. Allí no dudó en fotografiarse con todos los que se lo pidieron, entre ellos Emi Martínez, chef y jefa de sala del local. "Mirad quién vino a cenar anoche", escribió la empleada junto a la imagen.
Cayetano parece estar totalmente recuperado de su ruptura con María Cerqueira, noticia que confirmó la revista ¡HOLA!, y de su posterior detención por una presunta agresión a varios agentes de policía durante una discusión en una hamburguesería del centro de Madrid. Aquel incidente tuvo importantes consecuencias en su agenda de despedida de los ruedos. Canceló sus compromisos en Burgos, Santander, Ciudad Real y Málaga al no encontrarse físicamente preparado, según explicó entonces.
Ahora, tras demostrar que vuelve a ser el de siempre, ya tiene nuevas citas en el calendario: el 28 de agosto en Cuenca, el 30 de agosto en Tarazona de Aragón (Zaragoza) y el 7 de septiembre en Villarrubia de los Ojos (Ciudad Real).