El verano 2025 prometía ser una oportunidad para que la familia Beckham enterrara el hacha de guerra. Sin embargo, a tenor de sus últimos movimientos, el esperado milagro no ha llegado. Mientras David y Victoria disfrutan de sus vacaciones familiares, en aguas del Mediterráneo, con sus hijos menores —Romeo, Cruz y Harper—, la ausencia del mayor de los cuatro, Brooklyn, se ha hecho más notoria que nunca. Lejos de acercarse, la brecha familiar parece ensancharse y todo apunta a que el distanciamiento no es solo real, sino también doloroso, tal como informamos en páginas anteriores.
Para ti que te gusta
Este contenido es exclusivo para la comunidad de lectores de ¡HOLA!
Para disfrutar de 5 contenidos gratis cada mes debes navegar registrado.
Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.Este contenido es solo para suscriptores.
Suscríbete ahora para seguir leyendo.TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Este verano, como el anterior, está transcurriendo con risas, juegos y fotos familiares… pero también con una silla vacía que ni el lujo puede llenar. Lo más curioso de esta historia es que los Beckham y los Peltz han pasado sus vacaciones en la misma región, a pocos días de diferencia. Brooklyn y Nicola navegaron en el fabuloso Project X, de 80 metros y valorado en casi 100 millones de euros. Poco después, los Beckham llegaban al mismo muelle. Dos barcos, dos mundos. Y ni rastro de acercamiento.
A bordo de su megayate, Seven, valorado en 18,5 millones de euros y bautizado en honor al número icónico de la camiseta de David y al segundo nombre de Harper, los Beckham han compartido momentos que parecen sacados de un anuncio de ensueño. Desde partidos de fútbol improvisados en cubierta, hasta serenatas con guitarra, baños de sol, cenas frente al mar y risas al atardecer. Cruz, acompañado por su novia, Jackie Apostel, una compositora y productora brasileña de 29 años, ha mostrado su faceta más romántica. Romeo, por su parte, ha protagonizado divertidas escenas imitando los estilismos veraniegos de su padre, con bañadores tipo "slip". Harper se ha mostrado muy unida a su padre, confirmando la cercanía entre ambos. Y Victoria y David, siempre cómplices, han mostrado su unión tras 26 años de matrimonio, celebrado con mensajes en redes. "Estoy tan orgullosa de la familia que hemos construido. Te amo tanto, David", escribió ella.
Sin embargo, ese aparente paraíso veraniego tiene una grieta. Brooklyn no está. Y esta vez, ya ni siquiera es mencionado. Pese a todo, David no pierde la esperanza de superar el peor momento familiar. Hace apenas unos días, pulsó un "me gusta" en un vídeo de su hijo, cocinando pasta en casa. Un gesto que algunos interpretan como una pequeña ofrenda de paz, ya que, tal como ha asegurado una fuente del entorno del futbolista a The Mirror, "David está dispuesto a volar a donde sea para ver a su hijo. No quiere que esto siga así. Quiere sentarse a hablar y arreglarlo".