La Policía de Los Ángeles ha logrado desarticular una banda juvenil que llevaba meses sembrando el pánico entre las estrellas de Hollywood. El grupo, formado por cuatro jóvenes con edades comprendidas entre los 16 y 18 años, está acusado de cometer una serie de robos en mansiones de celebridades como Brad Pitt, Nicole Kidman, Tom Hanks, Jennifer Aniston o el futbolista de la selección francesa, Olivier Giroud.
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El caso ha salido a la luz tras el asalto a la residencia de Brad Pitt en el exclusivo barrio de Los Feliz en Los Ángeles (California), donde lleva viviendo desde los años noventa. El actor se encontraba promocionando su última película, F1: La película, cuando tres encapuchados saltaron la valla, rompieron una ventana y vaciaron la casa llevándose objetos de gran valor. Aunque las autoridades no mencionaron directamente el nombre del actor, por los detalles del robo, incluida la dirección de la mansión saqueada, coinciden con la denuncia presentada por Pitt. "El caso se originó con el robo del 25 de junio a un residente del 2300 de North Edgemont Drive", explicó un portavoz policial. Esa dirección coincidía con la denuncia presentada por Pitt, según confirmó el diario The Guardian.
La investigación reveló que no se trataba de robos improvisados. La banda utilizaba métodos sofisticados para planificar sus golpes: hackeaban el wifi de las viviendas para inutilizar las cámaras de seguridad y rastreaban redes sociales para saber cuándo sus propietarios estaban fuera de casa y así poder asaltarlas. Sin duda, un 'modus operandi' digno del mejor guion de Hollywood. Entre sus víctimas también figuran Rita Wilson, Austin Butler y Keith Urban, todos ellos con denuncias recientes por robos similares.
Dos de los detenidos, Damari Zair Charles y Jaquory Arman Watson, ambos de 18 años, fueron arrestados tras otro robo en el condado de Orange, en el sur de California, el pasado 7 de agosto. Enfrentan cargos de robo en primer grado, están sin derecho a fianza y podrían ser condenados hasta a seis años de prisión. Según el jefe de policía Jim McDonnell, todos los implicados pertenecen a una banda criminal organizada que operaba con precisión y conocimiento del entorno de sus víctimas.
La vivienda de Brad Pitt es conocida como Steel House, por estar rodeada por completo de ventanales. Al parecer es la que comparte con su actual pareja, la diseñadora de joyas madrileña Inés de Ramón, con la que mantiene una relación estable desde 2022. El actor adquirió esta propiedad en abril de 2023, según informa El País. Pagó unos cinco millones de euros a Aileen Getty, nieta del magnate petrolero J. Paul Getty, como parte de un intercambio inmobiliario. En los últimos años, Pitt ha demostrado ser un apasionado del diseño y la arquitectura, con inversiones en propiedades singulares como la “casa ovni” del Alt Empordà, que trasladó desde Cataluña a California.
Este nuevo golpe llega en un momento especialmente delicado para el actor, que recientemente tuvo que despedirse de su madre, Jane Etta Pitt, a los 84 años, una pérdida que le ha dejado muy afectado. En estos días difíciles, el actor ha encontrado en su novia su mayor apoyo emocional. Además, sigue lidiando con una relación tensa con sus hijos mayores, fruto de su matrimonio y posterior separación de la también actriz Angelina Jolie.
La desarticulación de esta banda pone fin a una ola de robos que había generado gran preocupación entre las estrellas de Hollywood. Sin duda, un caso que demuestra que, incluso en las colinas doradas de Los Ángeles, la fama no protege del crimen.