El sábado Neymar y su pareja, la influencer y empresaria Bruna Biancardi, dieron la bienvenida a su segunda hija en común, a quien han llamado Mel. La pequeña nació en el Hospital São Luiz Star, en São Paulo, tras una cesárea de urgencia motivada por la rotura prematura de la bolsa, según confirmaron fuentes próximas a la pareja. Tanto la madre como la recién nacida se encuentran bien, en un momento que, a pesar de las circunstancias, estuvo lleno de emoción, amor y significado para ambos.
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Esta nueva paternidad amplía la familia de Neymar, que ya es padre de cuatro hijos con tres mujeres diferentes: su primogénito Davi Lucca, de 13 años, fruto de su relación con Carolina Dantas; la pequeña Mavie, de 1 año y 8 meses, nacida junto a Bruna; y Helena, que acaba de cumplir un año, hija del futbolista con la también influencer Amanda Kimberlly.
Fue la propia Bruna quien compartió la feliz noticia a través de sus redes sociales con un mensaje que ha enternecido a sus seguidores: “¡Nuestra Mel llegó, para completar y endulzar aún más nuestras vidas! ¡Bienvenida, hija! Que Dios bendiga tu vida y te libre de todo mal. ¡Estamos ansiosos por vivir este nuevo capítulo contigo. ¡Te amamos!”, escribió con ilusión, firmando la publicación con su nombre, el de su primera hija, Mavie, y el de la recién nacida.
Una relación marcada por altibajos y reencuentros
La historia entre Neymar y Bruna Biancardi ha estado llena de capítulos intensos desde que comenzó en 2021, aunque no fue hasta el año siguiente cuando hicieron pública su relación. Con mensajes cariñosos y apariciones conjuntas, la pareja parecía consolidarse, e incluso se comprometieron oficialmente en 2022.
Sin embargo, la estabilidad se vio amenazada en varias ocasiones. En 2023, cuando Bruna estaba embarazada de su primera hija, surgieron fuertes rumores sobre una infidelidad por parte del futbolista, algo que terminó por confirmarse. La situación fue especialmente delicada, y Bruna, en aquel entonces, decidió compartir un breve pero rotundo comunicado en el que anunciaba su separación: “Esto es un asunto personal, pero como estoy diariamente vinculada a noticias, rumores y bromas, quiero informar que no estoy en una relación con nadie. Somos los padres de Mavie, y esa es la razón de nuestro vínculo”, expresó la modelo, sin mencionar directamente a Neymar pero dejando claro el contexto.
A pesar del distanciamiento y del revuelo mediático, la pareja retomó su relación a comienzos de 2024. Desde entonces, han apostado por mantener un perfil más familiar, compartiendo momentos especiales junto a sus hijas. El pasado viernes, 4 de julio, tan solo un día antes del nacimiento de Mel, ambos acudieron juntos a la celebración del primer cumpleaños de Helena. En esa ocasión, Neymar posó junto a sus hijas y escribió un mensaje muy tierno en redes: “Princesitas del papá”, en referencia a Mavie y Helena, mostrando su faceta más paternal.
En junio, Bruna sorprendía a sus seguidores al revelar, de manera discreta, que ya estaba casada con Neymar. Lo hizo respondiendo a una pregunta en sus historias de Instagram, en la que confirmaba su nuevo estado civil, sin dar más detalles.
Una familia numerosa y en constante transformación
Con la llegada de Mel, Neymar comienza una nueva etapa en su vida personal, esta vez más estable y centrado en su papel como padre. El futbolista, actualmente de regreso en Brasil tras su reincorporación al Santos, fue liberado de sus compromisos deportivos para poder acompañar a Bruna durante el parto. La pareja, que ya había anunciado el embarazo el pasado 25 de diciembre, durante la celebración navideña, organizó un emotivo ‘baby shower’ en la mansión del jugador en Mangaratiba, Río de Janeiro, rodeados de amigos y familiares. Fue entonces cuando revelaron públicamente el nombre de la bebé, que Bruna incluyó por primera vez en una cariñosa felicitación a Neymar: “Besos, Bru, Mavie y Mel”, escribió en un mensaje dedicado al padre de sus hijas.
Ahora, con la llegada de su hija, la influencer ha querido compartir también el motivo detrás del dulce nombre elegido. “Mel”, que significa literalmente miel en castellano, fue escogido por su carga simbólica. Bruna explicó que lo eligieron por lo que la pequeña representa en su relación y en su familia: “para completar y endulzar nuestras vidas aún más”.