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Joe Biden, expresidente de Estados Unidos, padece un cáncer de próstata agresivo con metástasis en los huesos. Según un comunicado de su oficina, Biden, de 82 años, fue examinado la semana pasada tras experimentar un aumento de síntomas urinarios. A pesar de la gravedad, tanto él como su familia se muestran optimistas y están estudiando las distintas opciones de tratamiento con sus médicos. "Si bien esto representa una forma más agresiva de la enfermedad, el cáncer parece ser sensible a las hormonas, lo que permite un tratamiento eficaz”, aseguran.
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"El cáncer nos toca a todos. Como muchos de vosotros, Jill y yo hemos aprendido que somos más fuertes en los lugares rotos. Gracias por levantarnos con amor y apoyo", añade Biden junto a esta foto en la que aparece muy sonriente junto a su mujer y su gato Willow.
Fue el pasado viernes cuando Biden recibió este diagnóstico, una dura noticia que llega cuatro meses después de dejar la presidencia, cediendo el testigo a Kamala Harris, quien fue derrotada en las urnas por Donald Trump.
Poco después de conocerse la noticia, el presidente Donald Trump envió un mensaje de apoyo a su antecesor a través de su plataforma Truth Social. "Melania y yo estamos tristes al enterarnos del reciente diagnóstico médico de Joe Biden. Expresamos nuestros mejores deseos a Jill y a la familia, y le deseamos a Joe una pronta y exitosa recuperación", escribió.
A sus 78 años, Trump ha cuestionado en varias ocasiones la capacidad de Biden para ejercer el cargo. Sin ir más lejos, esta misma semana afirmaba: "Conozco a gente de 89, 90, 92 y 93 años que están perfectos. Pero Joe no es uno de ellos, y lo escondieron".
El expresidente Barack Obama también quiso mostrar su apoyo a Biden en este delicado momento y destacó su compromiso en la lucha contra el cáncer. En 2015, tras la trágica pérdida de su hijo Beau a causa de un cáncer cerebral, Biden impulsó la iniciativa Cancer Moonshot, con el ambicioso objetivo de reducir en un 50 % las muertes provocadas por esta enfermedad en los próximos 25 años. "Nadie ha hecho más por encontrar tratamientos innovadores para el cáncer en todas sus formas que Joe, y estoy seguro de que afrontará este desafío con la determinación y la gracia que lo caracterizan", escribió Obama.
La salud de Joe Biden ha estado marcada por diversos episodios delicados a lo largo de su vida. En 1988, tuvo que ser ingresado de urgencia tras sufrir dos aneurismas cerebrales y, ese mismo año, también enfrentó una embolia pulmonar. Ya como presidente de Estados Unidos, en 2023, se le extirpó una lesión cancerosa en el pecho mediante una intervención que, según informó entonces el médico de la Casa Blanca, fue completamente exitosa y no requirió tratamiento adicional.
La última aparición pública de Joe Biden tuvo lugar el pasado 26 de abril, con motivo del funeral del Papa Francisco en Roma. A pesar de su visible fragilidad, el expresidente estadounidense, de profunda fe católica, quiso rendir homenaje al Pontífice y asistió a la ceremonia acompañado por su esposa, Jill Biden.
"El Papa Francisco será recordado como uno de los líderes más importantes de nuestro tiempo y me siento mejor por haberlo conocido. Promovió la equidad y el fin de la pobreza y el sufrimiento en todo el mundo. Y, sobre todo, fue un Papa para todos. Fue el Papa del Pueblo: una luz de fe, esperanza y amor", expresó Biden tras la emotiva ceremonia celebrada en la plaza de San Pedro, donde coincidió con Donald Trump y otros líderes internacionales.
Biden dejó la Casa Blanca en enero de 2025 como el presidente de mayor edad en ocupar el cargo. Durante su mandato (2021-2025), fue objeto de constantes cuestionamientos sobre su salud y aptitud para ejercer el cargo. No obstante, en julio de 2024 renunció a la reelección y respaldó la candidatura de su entonces vicepresidenta, Kamala Harris, quien ha reaccionado así al anunció de su enfermedad. "Joe Biden es un luchador, y sé que afrontará este desafío con la misma fuerza, resiliencia y optimismo que han definido su vida y su liderazgo", publicó Harris.