Aunque ya había participado en grandes producciones como Sin tiempo para morir, Blade Runner 2049 o, más recientemente, The Gray Man, poder meterse en la piel de Marilyn Monroe ha sido un gran reto para ella. "Trabajamos muchas horas todos los días durante casi un año", recordaba Ana. Para ello, se pasaba entre dos horas y media y tres horas peinándose y maquillándose cada mañana durante los 47 días que duró el rodaje.