Además de estar al frente de programas de Tu cara me suena o Veo cómo cantas, cuya nueva temporada se estrena este viernes 29 en Antena 3, Manel Fuentes tiene alma de rockero. Lo comprobamos el pasado martes 26 en su asistencia al concierto de Iggy Pop en el Teatro Real de Madrid, dentro de la programación de Universal Music Festival. Allí, el presentador nos habló de su faceta de cantante en The Spring’s Team, grupo tributo a su adorado Bruce Springsteen, al igual que de su curiosa relación con el cantante estadounidense.

En su encuentro con ¡HOLA!, Manel, que es padre de dos niños junto a la directora de televisión Clara Cabezas, nos compartió sus recuerdos del mítico Crónicas marcianas, cuyo estreno tuvo lugar hace ahora veinticinco años. Es el mismo espacio en el que también saltó a la fama el humorista Carlos Latre, su compañero en Tu cara me suena, aunque ambos no llegaran a coincidir en el tiempo.

—Manel, ¿en qué estado se encuentra tu faceta de cantante? ¿Sigues con ella?

—Sí. Hay algunos bolos cerrados de la pandemia. Ahora vamos a Cantabria, Torrelavega, y estamos preparando bolos de teatro, de a lo mejor tres días en una ciudad, donde explicaremos la historia de Bruce Springsteen. Lo haremos con toda la banda, para que los niños puedan disfrutarlo.

—¿Has llegado a conocer a Bruce Springsteen en persona?

—Sí, varias veces.

—¿Y sabe que Bruce tienes una banda homenaje?

—Sí, sí. Cuando nos vemos, dice: “How are we?” (ríe). Yo le respondo: “Tú bien. Yo hago lo que puedo” (ríe).

—Además de esos bolos y de arrasar con Tu cara me suena, estás a punto de estrenar una nueva temporada de Veo cómo cantas.

—Este formato es mucho más para verano. Es una cosa más familiar, para jugar en casa. Si alguien es cantante o no lo es, si se le escucha prácticamente la voz… Creo que es un aire de concurso musical, a la espera de que llegue Tu cara me suena 10, que llega en otoño y tiene casting un muy bueno. Veo cómo cantas es un jueguito para el verano y espero que la gente lo disfrute.

—Parte de la audiencia encuentra similitudes entre los dos programas.

—En Veo cómo cantas, la gente es anónima y no sabe si canta bien o canta mal. Tienes que elegir si canta bien o canta mal, en función de las intuiciones y de determinadas pruebas, como el playback desafinado, donde el concursante canta con dos voces. No sabes si una es la buena y otra es la mala… Cuál se adapta más a ese cuerpo. Es una cosa muy loca, con los asesores opinando. Hay gente que engaña. Y el concursante se está jugando dinero. Para este momento, con la crisis que hay, creo que es algo bueno que la gente se lo pueda llevar.

—¿Quién te acompañará en plató esta temporada?

—Los asesores, que intentan ayudar a los concursantes, son Ruth Lorenzo, El Monaguillo y Josie. Es un tridente buenísimo.

—¿Está grabado el programa?

—Sí, ya está terminado. Está bien. Yo creo que gustará.

—Menos mal que está grabado, porque así puedes descansar en verano.

—Puede ser que tengamos que hacer algún programa más y me toque pringar, así que no sé que vacaciones tendré…

—De todas formas, ¿qué planes tienes para estas vacaciones?

—Estar pendiente de esto y de la décima temporada de Tu cara me suena, que se estrena en otoño. Si tengo algunos días, los dedicaré a la playa, nadar y lectura.

—¿Qué es lo que más te gusta del verano?

—Me gusta nadar a las siete de la mañana.

—¿Vas tan pronto para que la gente no te reconozca?

—No, porque no hay barcos. A esa hora no salen barcas, así que puedo nadar tres kilómetros al mar y volver.

—¿Te suelen reconocer cuando vas a la playa?

—A esa hora no hay ni delfines (ríe).

—En las redes demuestras estar muy en forma. No te hace falta ninguna operación biquini.

—Sí, sí. Aún falta.

—¿Te cuidas mucho?

—No. Me cuidaba más antes, cuando hice la foto sin camiseta para una revista. Sí que intento estar bien de salud, pero no es una obsesión.

—¿Cuántas horas semanales le dedicas al deporte?

—No lo sé… Puedo ir cuatro días a la semana… O cinco.

—Sueles compartir imágenes en las redes cuando vas al gimnasio. ¿Te picas cada vez más?

—No, para nada. Me gusta estar bien, pero también me gusta disfrutar de la vida.

—Ahora se cumplen veinticinco años del estreno de Crónicas marcianas. ¿Qué recuerdas tienes del programa?

—Muy buenos. La verdad es que era un aprendizaje cada noche, porque era un programa en directo y era meterme en un mundo muy loco. Aprendí mucho, me lo pasé muy bien y también supe qué quería hacer y qué no, que es muy importante.

—¿Qué supiste que no querías hacer?

—Lo que no me hayas visto hacer (ríe).

—¿Mantienes contacto con compañeros de programa?

—Sí. La semana pasada cenamos Paz Padilla, Santiago Segura y otros…

—¿Y Javiar Sardá?

—A Sardá le veo también de vez en cuando. Sí, sí.

—Tu hijo mayor acaba de cumplir veinte años. ¿A qué se quiere dedicar?

—No sé… Supongo que quiere ser feliz, como yo (ríe).

—¿Te daría pudor si se dedicara a la televisión o al espectáculo?

—No. Que haga lo que quiera y que lo haga bien. Es lo único que le digo a mis hijos. Que trabajen duro en lo que quieren.

—¿Cómo eres como padre?

—No te lo puedo decir yo. Para que te juzguen como padre, te lo tienen que decir los hijos.

—Pero puedes decir si eres un padre severo o no.

—Eso lo tienen que decir os hijos.