Tras protagonizar el pasado fin de semana en la Dehesa Majavieja la boda más mediática en los que va de año, Alejandra Ruiz de Rato, hija del torero José Antonio Ruiz ‘Espartaco’ y Patricia de Rato, y su ya marido, el empresario Ernesto de Novales, han puesto rumbo a su luna de miel. La pareja ha decidido aplazar el gran viaje hasta que se relajen las restricciones sanitarias debido a la pandemia, pero no ha querido dejar de disfrutar de unos días ya como matrimonio.
¡HOLA! ha descubierto que, ya sin problemas de movilidad en la mayor parte del territorio español, la pareja ha puesto rumbo a la vecina Portugal, cuyas fronteras se abrieron hace dos semanas tras tres meses de aislamiento. Ya en el país luso, Alejandra y Tito, como es conocido su marido entre amigos y familiares, han visitado el santuario de la Virgen de Fátima, de la que ella es una gran devota. Este es un lugar conocido por las apariciones marianas y al que peregrinan entre seis y nueve millones de feligreses cada año.
Ubicado en la localidad homónima de Fátima, en el centro de Portugal, entre Oporto y Lisboa, su origen se remonta a 1917 cuando tres pastores afirmaron haber presenciado varias apariciones de la Virgen en una cueva llamada Cova da Iria. Fue allí donde construyeron una capilla que, poco a poco, ha ido evolucionando en el santuario actual.
Alejandra es una joven muy religiosa. Vive con intensidad la Semana Santa, especialmente La Madrugá. Uno de sus momentos preferidos es ver de cerca a la Esperanza de Triana. En 2014, debutó como enfermera en el santuario de Nuestra Señora de Lourdes, ubicado en Francia. Acudió allí de la mano de su madre, quien suele peregrinar habitualmente hasta el citado santuario galo.
Para Alejandra, que entonces estudiaba Gestión, Administración de Empresas y Marketing en el ESIC de Madrid, supuso una experiencia única y muy enriquecedora. Hoy, siete años después de aquel momento, y solo unos días después de pasar por el altar, ha viajado hasta Fátima para que la Virgen bendiga su matrimonio.
