Mundo singular
Una amistad puramente animal
La naturaleza nos da una buena lección al mostrarnos cómo la amistad, en el reino animal, no entiende de raza ni de colores. Historias de amistad entre perros y gatos nos son ya más comunes, pero hay casos inverosímiles que llegan incluso a desafiar a la lógica. En la imagen, vemos a un monito y cachorros de león y tigre jugando juntos en el Guaipo Manchurian Tiger Park en Shenyang, provincia de Liaoning, en China. La cría de león, de 32 días, y el simio, de 16, se pasan el día haciendo trastadas. El mono a veces aprovecha y descansa su cabeza en el felino que lo recibe complacido. Nada más nacer, ambos fueron separados de sus madres, que no podían producir suficiente leche para alimentarlos. Más tarde se unieron los dos cachorros de tigre. Los cuatro se han convertido en íntimos.