El convento de la Asunción de Calatrava, en Almagro, ha sido hoy testigo de la boda de Victoria de Borbón-Dos Sicilias y Markos Nomikos, a las 13.00 horas. La novia, hija de Carlos de Borbón-Dos Sicilias, duque de Calabria, y de la princesa Ana de Francia, ha dicho el "sí quiero" a su prometido, el armador griego Markos Nomikos, de 38 años de edad. Y, como testigos del enlace, la Familia Real española al completo: los Reyes, el Príncipe de Asturias, las infantas Elena y Cristina con sus maridos; la Familia Real griega, representada por la reina Ana María,Irene de Grecia, acompañada en un primer momento por el príncipe Felipe, Alexia y su marido, Carlos Morales y Pablo de Grecia con su mujer, Marie-Chantal Miller; y la Familia Real búlgara, con la presencia de la reina Margarita y de, entre otros, Kyril de Bulgaria con su esposa, Rosario Nadal.
Un amor a primera vista Victoria de Borbón-Dos Sicilias y su prometido se conocieron hace algo menos de dos años. La petición de mano fue en mayo de 2003 y desde entonces han preparado con ilusión todos y cada uno de los detalles de su boda que, desde los primeros tiempos, decidieron que se celebraría en la finca La Toledana, el mismo lugar donde la princesa Cristina, hermana mayor de Victoria, contrajo matrimonio con Pedro López-Quesada, en 1994.
Una ceremonia siguiendo dos ritos La ceremonia ha durado una hora y veinte minutos. No podía ser menos si consideramos que se ha celebrado siguiendo el rito católico y el ortodoxo (en consideración al novio). La capilla estaba decorada con flores silvestres (Victoria de Borbón-Dos Sicilias, no podemos olvidarlo, siente un gran amor hacia las plantas ya que estudió decoración de jardines).
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