Plisado
Lorenzo Caprile fue el encargado de firmar el vestido de madrina que Carolina Molas llevó en la boda de su hijo, Íñigo Onieva, con Tamara Falcó. Se trataba de un diseño confeccionado en gasa de seda azul marino plisada, un tejido ligero y lleno de movimiento, perfecto para una boda de verano. Aunque sencilla, la prenda tenía dos detalles que la hacían única. Por un lado, sus mangas ligeramente abullonadas, culminadas en un sencillo puño; por otro, el plisado en la zona central del vestido, decorado con una delicada pedrería, que ayudaba a estilizar aún más la silueta.