Aunque está inmerso en su gira de conciertos por toda España, David Bisbal siempre tiene tiempo para mostrar su simpatía allá por donde pasa. La siguiente parada del tour es precisamente su tierra andaluza, Sevilla, donde congregará a sus fans en el Auditorio Rocío Jurado este mismo día 30 por la noche, para que bailen y coreen los temas de Sin mirar atrás. Horas antes y “escapándose” de los ensayos, el artista se acercó al zoo de Guillena donde le esperaba un bautizo muy especial.
Uno de los pequeños tigres nacidos en el recinto necesitaba un padrino y, sin pensárselo dos veces, Bisbal aceptó encantado. Ni miedo ni nervios demostró el intérprete- se atrevió incluso a darle un beso ya que el bebé tigre estaba muy tranquilo- cuando cogió a la pequeña cría con una sola mano para mostrársela a la gente. “Este es precioso. Los que me daban miedo eran su padre y su madre” bromeó. El nombre que eligió para el bebé fue Goliat, haciendo un guiño a la historia de David y el gigante del mismo nombre (aunque de momento el animal está lejos de ser un gigante).
Su buen humor y trato cercano han convertido a David Bisbal en uno de los artistas más queridos del panorama musical internacional. El almeriense pasará todo el verano en España, recorriendo sus escenarios, mientras Elena Tablada y su hija Ella, de apenas cuatro meses, se quedan en Madrid para verle siempre que tenga unos días libres. “David como padre es buenísimo. Se le cae la baba y como la niña es igual que él, igual, igual, igual, está encantado” comentaba Elena recientemente.
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