Pilates, Yoga, Tai Chi... ¿qué une y qué diferencia a todas estas técnicas orientales?

En general, ayudan a conseguir equilibrio y flexibilidad, y son perfectas para combatir el estrés

Por hola.com

En los últimos años se han convertido en algo más que una tendencia en gimnasios y centros deportivos. Y es que las técnicas orientales como el Pilates, el Yoga, y el Tai Chi (sólo por mencionar algunas), han conseguido conquistar a miles personas en todo el mundo interesadas no sólo en cuidar su cuerpo sino también su mente. Pero... ¿qué diferencia a unas de otras? Le contamos en qué consisten y en qué casos están indicadas algunas de estas solicitadas técnicas.

Método Pilates: gana flexibilidad
¿Qué es? Consiste en una técnica inventada hace más de 80 años y comprende ejercicios que se concentran sobre todo en los músculos abdominales. Combina técnicas de gimnasia, ballet y yoga.
¿En qué consiste? El método Pilates trabaja la capa más profunda de nuestros abdominales para reestructurar el cuerpo. Consta de 34 movimientos y combina ejercicios de suelo y aparatos.
¿Por qué probarlo? Para aliviar tensiones y mejorar la flexibilidad. Este método ayuda a generar un cuerpo esbelto y tonificado. El método Pilates ayuda a fortalecer y estirar todo el cuerpo, de la cabeza a los pies, dando lugar a unos músculos más esbeltos.

Yoga: relax absoluto
¿Qué es? El yoga pretende luchar contra las agresiones externas del día a día, (estrés, dolor de cabeza, ansiedad, tensiones...), y recuperar la estabilidad a través del cuerpo, la mente y el espíritu.
¿En qué consiste? Las posturas tradicionales del yoga (estiramientos y las asanas) relajan la tensión muscular y las articulaciones, mientras que conservan la salud general del cuerpo. La base de esta técnica milenaria reside en la respiración. Se trata de aportar calma a la mente y desarrollar la meditación. Alcanzar la tranquilidad y el equilibrio es el objetivo del yoga, que luego se extenderá a todas las facetas de la vida.
¿Por qué probarlo? A diferencia de otros métodos de relajación, como el masaje o la reflexología, en el yoga no necesitas a otra persona. Es una técnica que fomenta la autoaceptación y una actitud ante la vida en la que prevalece la calma.