Modernas habitaciones y suites, donde predominan los tonos blanco y tierra, con zonas exteriores ajardinadas y una enorme piscina central (en realidad es una sucesión de varias piscinas unidas entre sí) entre los dos edificios en forma de ‘u’ del hotel. No son las únicas, hay que buscar las infinity pool en los dos rooftop que se sitúan al final de los dos edificios donde están las habitaciones. El mejor lugar para disfrutar de un cóctel, la puesta de sol o simplemente para relajarte contemplando la panorámica, que desde aquí es única. Uno de los rooftop es de acceso libre, mientras que al otro solo podrán entrar quienes hayan contratado el servicio The Level, una estancia a otro nivel, con áreas de desayuno, comida, terrazas, lounge o espacios de relajación privados.
Una grata sorpresa os llevaréis en el spa y wellness center. Diseñado por el arquitecto italiano Simone Micheli, el espacio de 2.000 metros cuadrados -el más grande del país- cuenta con una completa zona de aguas con piscina interior de 25 metros, jacuzzi, sauna húmeda, seca, de hielo, cueva de sal y una carta donde no falta ningún tipo de masaje.
ZEL, la nueva marca de hoteles lifestyle de Rafa Nadal