La reina Sofía no ha esperado al día de Reyes para hacerse el mejor regalo de Navidad con el que podía soñar. Conocida su pasión por los animales, nada deseaba más que tener su propia protectora y al fin, el proyecto verá la luz. Ilusionada con los preparativos, la sonrisa con la que la hemos visto cogiendo ideas para la organización y distribución de las instalaciones lo dice todo. Con un cómodo plumas, ha recorrido las obras sin perder detalle y, probablemente, imaginando el resultado final de su proyecto.
Para ti que te gusta
Lee 5 contenidos gratis al mes con
solo registrarte.
Aprovecha nuestra oferta de Navidad
y navega sin límites durante 1 año
desde 19,50€
Este contenido es solo para
suscriptores.
Aprovecha nuestra oferta de Navidad
y navega sin límites durante 1 año
desde 19,50€
Este contenido es solo para
suscriptores.
Aprovecha nuestra oferta de Navidad
y navega sin límites durante 1 año
desde 19,50€
TIENES ACCESO A 5 CONTENIDOS DE
Recuerda navegar siempre con tu sesión iniciada.
Las instalaciones definitivas estarán en Arganda del Rey. El ayuntamiento de la localidad ya adelantó el pasado mes de julio que la Fundación Reina Sofía había aprobado la construcción de un centro de protección animal para el que había pedido la implicación del consistorio. “Decimos sí por los animales, decimos sí por todos los argandeños y decimos sí para seguir creciendo”, respondió entonces el alcalde, Alberto Escribano, a través de sus redes sociales. Por su parte, el patronato de la Fundación solicitaba “la aportación del suelo dotacional en el que materializar la construcción de dicho Centro, mediante un convenio al efecto que permita la constitución de un derecho de superficie”. La parcela se encuentra en la finca La Isla y doña Sofía ya la visitó en abril junto al alcalde.
No es de extrañar que este proyecto haga tan feliz a la reina Sofía, teniendo en cuenta que toda su vida se ha desvivido por los animales y su bienestar es una de sus principales preocupaciones. Precisamente, sus cinco perros han sido los protagonistas de su felicitación navideña con el rey Juan Carlos. Se trata de dos cocker spaniel negros, dos schnauzer miniatura blancos y, el más pequeño de todos, un simpático peekapoo, propiedad del matrimonio, pero de los que ahora se ocupa la Reina desde que su marido se trasladó a Abu Dabi hace cinco años. Además de perros, en Zarzuela también tiene burritos, una especie por la que siente una especial predilección. Tiene varios ejemplares amadrinados en el sur de España y con motivo de su 70º cumpleaños le regalaron una pareja de asnos zamorano-leoneses que viven en las cuadras reales.
También en el zoo de Madrid pueden dar buena cuenta de la sensibilidad de doña Sofía por el mundo animal. Inolvidable su vínculo con el mítico oso panda Chulín, el primer ejemplar nacido en cautividad en Europa. Sus padres fueron un regalo del Gobierno chino a los reyes Juan Carlos Sofía durante un viaje oficial y éstos los donaron al zoo. Su apoyo a la conservación de estos animales le ha valido el reconocimiento internacional del Ouwehand Zoo de Rhenen, en Holanda que en el año 2019 le concedió la medalla de oro de los premios Giant Panda Global. También ha participado en la liberación de varias tortugas marinas, la última vez el año pasado en Tenerife después de bautizarlas ella misma. Su sonrisa en ese tipo de actos solo es comparable a la que luce en las fotografías cuando ve tan cerca el sueño de su vida.
