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La infanta Sofía ha vivido un día inolvidable al celebrar su graduación en el UWC Atlantic College de Gales, donde ha cursado el Bachillerato Internacional en los últimos años. Aunque el día amaneció gris, lejos del sol radiante que acompañó la ceremonia de Leonor, hace dos años exactamente, nada podía eclipsar la alegría de los Reyes de España, quienes vivieron el momento como cualquiera de los padres que asistieron al acto: llenos de orgullo y emoción. Solo faltó su hermana Leonor, que continúa su formación militar a bordo del Juan Sebastián Elcano. Actualmente, se encuentra atracado en República Dominicana y le fue imposible acompañar a su hermana en un momento tan especial.
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El rojo ha sido el color elegido por la Reina y su hija en su atuendo para este día tan especial: un mono de escote asimétrico, la infanta, y un traje de chaqueta, su madre. En cualquier caso, ambas han apostado por la sobriedad y la sencillez en sus looks, sin adornos ni complementos llamativos, dejando que la elegancia de la simplicidad hablara por sí misma. Al igual que su hija, Letizia también ha dejado suelto su cabello, desprendiendo naturalidad y reflejando, en algunos momentos, una emoción contenida de una madre orgullosa.
Desde el inicio de la jornada, los Reyes han tratado de pasar desapercibidos entre el resto de familias, en un ambiente muy diferente a los actos protocolarios a los que suelen acudir. Solo un profesor de su hija se ha acercado a ellos para saludarlos y lo ha hecho de una manera discreta, según cuentan en Fiesta. Se trata del único maestro español que la Infanta ha tenido en estos años en el internado galés, el mismo que le dio clases a su hermana Leonor durante su estancia en este college galés.
El Rey, 'reportero gráfico'
En esta ocasión, los Reyes dejaron de lado su papel institucional para vivir, como cualquier familia, la graduación de la infanta Sofía. Ella fue la verdadera protagonista del día, junto al resto de compañeros de promoción, en una ceremonia que marcó el cierre de una etapa y el inicio de nuevos desafíos. Felipe VI, móvil en mano, no dejó de fotografiar a su hija pequeña, un gesto que sorprendió a muchos, ya que suele ser la reina Letizia quien inmortaliza estos momentos. Mientras el Rey ejercía de reportero gráfico, Letizia observaba embelesada a su benjamina, orgullosa de verla culminar su formación en el UWC Atlantic College de Gales.
El siguiente paso para Sofía será la universidad, aunque aún no se ha definido si optará por una carrera de Letras o Ciencias ni en qué institución continuará sus estudios. Lo único seguro es que, al haber cursado el Bachillerato Internacional, no tendrá que realizar la temida PAU (Prueba de Acceso a la Universidad), que el próximo mes de junio realizarán el resto de estudiantes españoles. Este tipo de Bachillerato le permite un acceso directo a cualquier universidad española. Su admisión dependerá exclusivamente de sus calificaciones, y según sus profesores, su expediente es brillante, con casi todo sobresaliente.
Durante la ceremonia, que fue más breve que la de su hermana Leonor, los docentes destacaron la evolución de Sofía a lo largo de sus años en el internado. La describieron como una joven aventurera, de personalidad cálida y vibrante, y resaltaron su madurez y compañerismo. Además, también se ha sabido que es una gran fan de la saga de Star Wars.
Tras el acto académico, la celebración ha continuado en un ambiente familiar y relajado, lejos del protocolo habitual de los Reyes. Se han celebrado actividades culturales y sociales, en las que los asistentes disfrutaron de una jornada especial, centrada en los graduados y sus logros. Mientras Sofía compartía momentos con sus compañeros, los Reyes irradiaban felicidad y se mostraban orgullosas de su hija en este día tan significativo. A partir de ahora, la hermana de Leonor inicia una nueva etapa en su vida. Pero, de momento, está disfrutando de su gran día, rodeada del cariño de sus padres que, más allá de su posición institucional, celebraron con orgullo el esfuerzo y los logros de su hija.