Este 2025 nos ha dejado tendencias nupciales inolvidables, un sinfín de ideas para organizar una boda, una amplia selección de nuevas colecciones para la protagonista del día y sus invitadas y un buen puñado de historias de amor ilusionantes. Precisamente en las novias más virales de Hola.com nos fijamos antes de que el año concluya, porque ellas se han convertido en fuente de inspiración para todas aquellas prometidas que pasan por el altar en 2026. En esta selección de las 10 que más han gustado a nuestras lectoras encontramos vestidos hechos a medida, en los que los bordados, los retales antiguos, los encajes e incluso los motivos pintados a mano tienen todo el protagonismo. Porque el secreto de su éxito reside en ser fieles a su personalidad.
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Paloma
Jugar a mezclar tendencias en un look nupcial no es tarea sencilla y, sin embargo, Paloma logró que en su estilismo pareciera fácil. Esta estilosa novia confió en el atelier de From lista with love para hacer su vestido con flores pintadas a mano y capa de lentejuelas realidad. Una apuesta con mucho sentido de la moda y notas románticas y modernas, perfecta para casarse en septiembre en Madrid.
"Mi universo de referencias fue muy amplio: desde las composiciones florales de los cuadros de Frida Kahlo y los tejidos mexicanos, pasando por toda la pintura de Monet en mis visitas a Giverny, hasta llegar al vestuario diseñado por Chanel para el Ballet de la Ópera de París. Durante las pruebas de vestido, Maca me recomendó ver la película de María Antonieta y me sentí superidentificada también", contaba acerca de su diseño. Tras dos años y medio de relación, se casó en una bonita ceremonia en el colegio Nuestra Señora del Pilar.
Alejandra
En ocasiones cuando un vestido te entra por los ojos, no hay necesidad de pruebas o de búsqueda de tejidos, esa prenda prêt-à-porter se convierte en la definitiva. Es lo que le sucedió a Alejandra con una propuesta de la diseñadora, tocaya, Alejandra Valero. Era el modelo Manhattan de la casa, una creación tan delicada como bohemia. La base era un slip dress, lencero y encima lucía una pieza con detalles bordados e influencias de los años 20. Se trataba de una creación desmontable, pero no llegó a transformarla y se mantuvo toda la boda con el mismo look.
Fue el pasado 28 de junio en la iglesia de Cifuentes, Guadalajara, donde contrajo matrimonio con Alejandro. Se habían comprometido al cumplir 10 meses de amor y el suyo fue un enlace entrañable. “Queríamos una boda muy familiar, en la que nos sintiéramos como en casa”, relataba. Y lo lograron con muebles caseros, mucha naturalidad y un espíritu de cercanía al más puro estilo Mamma Mia!.
Marta
Tan solo cinco meses fue el tiempo que la diseñadora Marta Ovelar tuvo para organizar su boda. Se casaba tras seis años de relación y pasó por el altar el pasado 25 de julio, en la Ermita de la Virgen del Monte, en Cazalla de la Sierra, Sevilla y lo celebró en la finca que pertenece a su familia, en el mismo municipio. Para la ocasión, confió en la firma, ubicada en la capital andaluza, Carmen Maza. "Soy sevillana y estoy enamorada de nuestras fiestas y tradiciones. Me encanta vestirme de flamenca y tengo una pequeña marca de mantoncillos y complementos que lleva mi nombre: Marta Ovelar. Mi idea era cruzar el encaje en el pecho homenajeando al mantoncillo”, explicaba nuestra protagonista.
El look, que dio la vuelta a la red, se componía de unas mangas ligeras, un fajín drapeado en tul de seda, una cola de organza y el encaje en el escote a modo de mantoncillo. Completó el estilismo con un conjunto de joyas a todo color: "Me entusiasma el coral y yo misma diseñé una gargantilla de cuatro vueltas con un rosetón inspirado en joyas de anticuario. Me la realizaron en coral mediterráneo y junto con los pendientes, creo que daban un toque muy andaluz, consiguiendo que el resultado fuera ‘muy yo’".
Julia
No fue la primera, pero sí la segunda firma que Julia visitó la que le enamoró por completo y la animó a cancelar el resto de citas. En Inés Martín Alcalde encontró la horma de su zapato y es que la diseñadora le inspiró la confianza suficiente para terminar por dar forma a un look que no ha pasado desapercibido en los últimos meses. Aquel día, nuestra protagonista acudió con su madre a la visita y ella mostró a la diseñadora el que fue su vestido de novia, en él una torera llamó la atención del equipo de diseño. “Decidimos retirarle las mangas originales y aprovechar parte del tejido para crear unos puños, colocados a media altura del antebrazo”, relataría la propia Julia.
Así se dio forma a un estilismo con una base que era una pieza en blanco roto, con escote en pico, espalda cuadrada y tirantes rectos, que completó con una mantilla de su bisabuela. En mitad del banquete, Julia prescindió de la torera para quedarse únicamente en tirantes. Una apuesta desmontable que la hizo estar radiante el 7 de junio, en la Iglesia de Santiago Apóstol de Málaga.
Patricia
Una de las grandes tendencias nupciales que nos ha dejado este año que concluye es la de los vestidos de novia de inspiración medieval. A este fenómeno viral se sumó otra de nuestras protagonistas, Patricia, que para su gran día eligió a Navascués. “Siempre me han encantado los trajes de esa época de las películas y las obras de teatro”, defendía. Su diseño, que obró el milagro de que la compararan con Isabel La Católica, constaba de cuatro piezas que se iban desmontando a modo de puzzle.
Primero, un chaleco de crepe con mangas largas a modo de cola, conocidas como mangas de ángel. Otra capa era un sobrevestido con godets, transparencias y abertura frontal, con mangas de bambula que se podían retirar. Por último, el vestido base era lencero, minimalista, en satén de seda. A juego con estos cambios, también apostó por peinados transformables y todo ello en un entorno como el de las aguas de río Gállego, en Huesca, con su ermita de Santa Elena, era más que apropiado.
Adriana
Las amantes del sector nupcial se habrán topado en este 2025 con el viral look nupcial de Adriana. Para su boda en Madrid, que tuvo lugar en 2024, pero se popularizó este año que concluye, eligió un diseño de lo más voluminoso, digno de una princesa. El look, con referencias a la primavera y al traje de flamenca, fue un diseño de la novia y de su madre, que hizo realidad Musal Defier Atelier. Semana tras semana el diseño iba admitiendo diferentes modificaciones hasta llegar a su estilismo con silueta línea A, escote Bardot, mangas largas acabadas en volante, falda con volumen con cuatro volantes de diferente tamaño.
La primera capa era un crepe blanco con flores bordadas y sobre ella se dispusieron diferentes capas de tul. Ya más cómoda, para la posterior celebración recurrió a una prenda diferente, un vestido largo de crochet con escote halter. Pero fue, sin duda, el primer estilismo el que más aplausos recibió.
Elena
Cuando comenzó a imaginar su vestido de novia, Elena estaba muy indecisa. Esta estilosa novia apostó por el trabajo de Alejandra Oria para casarse en La Coruña, pero al principio no tenía nada claro. Fue la diseñadora la que la convenció para que el punto de partida de su look fuera una camisa de mangas abullonadas, con cuello clásico y hombros caídos. La base era un diseño de manga a la sisa en color champán, encima colocaron la camisa semitransparente de textura arrugada con fajín a juego.
El velo fue una seda salvaje que casaba a la perfección con la estética del diseño y el ramo lo protagonizaban unas hortensias oscuras. Aquel 9 de noviembre de 2024 nuestra protagonista no pudo imaginar que meses más tarde su estilismo recibiría tantos piropos dentro y fuera de la web y los perfiles de HOLA.com.
Ángela
En pleno verano en Sevilla, el pasado 5 de julio, Ángela se unía en matrimonio con Eduardo. Su boda fue todo un fenómeno viral en el sur, puesto que la andaluza es una influencer al alza. De todos los ingredientes que hicieron de su día una jornada memorable, el más llamativo fue su look nupcial. Desde pequeña soñaba con su enlace y para un momento tan relevante se puso en manos de la diseñadora María Palomo. En su taller sevillano confeccionaron una pieza de aire medieval, con escote Bardot, fajín y mangas acuchilladas y anudadas, como si del mejor vestuario teatral se tratara.
“Me encantaba la idea de sentirme como un hada, una princesa, pero de las antiguas. Como esos vestidos que vemos en películas o libros de época, pero llevados a la actualidad, más frescos y juveniles”, reconocía la propia Ángela. Para su creación se emplearon 20 metros de gasa de seda, una cola bordada en lino y un velo de seda natural francés. Para la fiesta, nuestra protagonista decidió cambiar de registro y apostó por un dos piezas de Victoria Colección, con falda de volantes y cropped top.
Natalia
Cantabria fue el enclave escogido para la boda de Natalia, una apasionada de los encajes y los retales antiguos que también forma parte de nuestra selección de novias más virales. Su primera y única cita fue en el atelier del diseñador Manuel de Vivar, a donde, dejándose guiar por su instinto, llegó y acertó. “Cuando llegué a esta primera visita, Manuel se había encargado de ir a un anticuario y hacerse con un dosel antiguo bordado. Durante la prueba me estuvo enseñando cómo trabaja y me planteó las diferentes formas de integrar el dosel en cualquier diseño”.
Sabía que quería un look con bordados, encajes y una falda con volumen, una propuesta clásica con el valor añadido que otorgan los detalles antiguos. Lo más destacado del vestido fue un cuerpo marcado por la citada pieza de anticuario y unos encajes antiguos que la propia Natalia le llevó y que pertenecían a su bisabuela. Aunque nuestra protagonista se casó con su actual marido, Nacho, el 7 de septiembre de 2024, la red no descubrió su estilismo hasta unos meses después y su éxito en 2025 ha sido incuestionable.
Carlota
El vestido de novia de Carlota fue un sueño hecho realidad. Desde que era pequeña sabía que se casaría con el look nupcial que su madre llevó en su boda, una espectacular creación firmada por Lorenzo Caprile. Y lo hizo realidad el 28 de septiembre de 2024, pero su boda dio la vuelta a la red en este 2025, gracias a la citada pieza con manga larga, corsé y una falda con cola de tul, al que apenas tuvo que hacerle arreglos. "Quería llevarlo porque me apasionaba que tuviera significado, me gustaba el diseño y sentaba muy bien”, nos contaba.
Además de este estilismo, llevó una segunda opción, más cómoda y ligera, para el banquete y la fiesta, que Sole Alonso le hizo a medida y para la que también modificó su peinado (pasó de una coleta a un semirrecogido con ondas). El diseño se componía de una blusa con flores blancas bordadas que iba colocada sobre un vestido realizado en lino rústico y gasa de seda para la falda de volantes. Dos looks preciosos, que hoy siguen causando sensación, para casarse a finales de verano en Toledo.