Cuando el año pasado las pasarelas se llenaron de tonos vainilla y limón, todo apuntaba a que esta gama cromática iba a quedarse más allá de una temporada. Y así ha sido. Esta primavera-verano 2025, la tonalidad ha virado hacia un amarillo mantequilla, convertido ya en imprescindible para las invitadas que buscan un look de tonos neutros y no quieren recaer en el blanco o el beige. Lo hemos visto en versiones lenceras y etéreas de The Row, en vestidos drapeados de Chloé y en conjuntos florales de Carolina Herrera. Coperni y Zimmermann lo han defendido en formas fluidas, muy apropiadas para enlaces de día.
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¿Una ventaja? Es fácil de combinar: con complementos dorados y metalizados para la noche, y con texturas naturales, como rafia, el esparto o crochet, para bodas de día o eventos al aire libre. Y si buscas un punto de contraste, atrévete con accesorios en verde menta, azul celeste o fucsia. Si a ti también te convence, hemos encontrado 11 vestidos en amarillo mantequilla que te pueden encajar.
Ba&sh interpreta el color amarillo mantequilla en un vestido de escote cruzado, con mangas que caen suavemente hasta el codo y una lazada que marca la cintura. La falda fruncida aporta movimiento y crea una silueta romántica que no renuncia a la comodidad. Tiene un toque bohemio, tal y como dictan las pasarelas, por lo que es ideal para enlaces de día o celebraciones al aire libre. Disponible por 345 euros.
Bruna, en cambio, opta por una propuesta minimalista y rotunda. El vestido Cara Le Palmier, confeccionado en crepé satén reciclado, apuesta por una silueta limpia que evoca los icónicos vestidos lenceros de los 90. La espalda se convierte en protagonista con unas tiras confeccionadas en el mismo tejido, creando un efecto cruzado que aporta estructura sin perder ese aire relajado que siempre favorece. Menos es más. ¿Los complementos ideales? Sandalias metalizadas y un clutch a tono. Disponible por 115 euros 57,90 euros.
Si dudas con tu vestido de invitada, puedes apostar sobre seguro con diseños de líneas depuradas, colores serenos como el amarillo mantequilla y escotes peculiares en los que recaiga el protagonismo del look. Uno de los más elegantes y favorecedores es este off-the-shoulder cruzado como el que vemos en la propuesta de invitada de Coosy. Su manga francesa y falda midi de vuelo lo compensan visualmente. Disponible por 130 euros.
Coosy hace una apuesta en firme por esta tonalidad pastel, imprimiendo su ADN elegante en diseños atemporales como el modelo Santina. Esta vez, prescinde de escote a favor de un cuerpo ablusado y drapeado con manga larga, cuello subido y falda con vuelo, ultrafemenino. Disponible por 160 euros.
Quizás el escote imperio se asocie con looks más elaborados, con mangas trabajadas y cierta estética Jane Austen. Sin embargo, admite también aires renovados y mucho más ligeros como este diseño de El Corte Inglés. De tirantes, ceñido al pecho y con falda de godets, que proporciona un movimiento muy elegante. ¿Una clave de estilo? Añade un pañuelo a tono al cuello o sobre el pecho, con los extremos cayendo por la espalda, sobre todo si estás invitada a ceremonias celebradas por la Iglesia. También puedes añadir una capelina ligera que vaya en consonancia al look. Disponible por 149,95 euros.
Las modas son cíclicas y pasados unos 10-15 años volvemos a ver siluetas que creíamos olvidadas. Es lo que está sucediendo con los vestidos globo, que presumen de un bajo fruncido que les aporta un volumen comedido y un movimiento especial. Mango lo replica en este vestido que compensa el bajo con un escote tan minimal como el palabra de honor. Una oda al año 2000 con aires renovados y el color de tendencia. Disponible por 119,99 euros.
Rematar un vestido con volantes XL puede hacer de un vestido muy sencillo de líneas depuradas un auténtico look de invitada de alto impacto. Lo vemos con este diseño de Zara, de escote pico, tirantes finos con lazadas y bajo de volantes en el mismo tejido. Sencillo y efectivo. Disponible por 35,95 euros.
Los vestidos con detalles confeccionados en punto smock, abandonan su carácter aniñado para vestir a la legión de invitadas que se han dejado embaucar por este nido de abeja. Realizado en un voile de algodón, con escote a caja y sisado y falda larga fruncida, es un diseño al que un cambio de complementos siempre le viene bien. Puedes llevarlo con sandalias para una boda o con zapato plano para reutilizarlo después, una y otra vez, en tu día a día. Es de Simorra y está a la venta en El Corte Inglés. Disponible por 218 euros.
La tendencia coquette que tanto dio que hablar el año pasado ha dejado su poso naïf en vestidos como estos donde los lazos son protagonistas. Eso sí, vuelven con aires renovados a través de este tono pastel que mantiene su esencia. Con escote rematado con lazos, manga abullonada y silueta lápiz, es uno de esos diseños que acapararán todas las miradas. Disponible por 535 euros.
Con escote asimétrico y cuerpo drapeado, este vestido de Staud es el claro ejemplo de todo lo que un corte bien estudiado puede hacer por tu look. Disponible por 520 euros.
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