La diseñadora Fátima González nos da las claves para ser una madrina 'joven, favorecida y esbelta'

Desde los distintos protocolos que hay que seguir hasta las tendencias que triunfan esta temporada entre las madres de los novios (y novias)

por Paula Callejo
Fátima González

Después de los novios, la madrina es, tradicionalmente, la figura más destacada en toda boda, algo que no se refleja solo en su función de acompañar al prometido al altar y estar junto a él durante la ceremonia, sino también en su estilismo. Ella es la única que cuenta con un protocolo diferente al del resto de invitadas, y puede ir de largo independientemente del lugar y hora de la ceremonia. Además, existe un emblemático accesorio reservado para ella, la mantilla. Por todos estos factores, es también una de las que más suele darle vueltas a su look.

Al preguntar a diseñadores, nos cuentan que la mayoría de madrinas y madres de novia que reciben en sus talleres coinciden en que quieren verse muy elegantes pero a la vez juveniles, puesto que uno de sus mayores miedos es que, al arreglarse más que nunca, se sientan muy 'señoras'. Hablamos con Fátima González, diseñadora española especializada en novias e invitadas, para descubrir sus mejores consejos y ver cómo adaptar las tendencias del momento a este tipo de estilismos. 

¿En qué difiere el protocolo de la madrina con respecto al de las demás invitadas a una boda?

La madrina, como madre del novio, representa el papel más destacado por detrás de la novia, que es la protagonista indiscutible en una boda. En España, la máxima etiqueta para la madrina es la mantilla española, una prenda que me encanta por las profundas raíces que tiene en nuestras costumbres y tradiciones. Y no es sólo que la mantilla, junto con su inseparable peineta, sea capaz de crear una silueta más esbelta al añadir unos centímetros de altura visualmente, sino porque transforma a quien la lleva en una mujer con poderío y elegancia. También hay madrinas que prefieren llevar, en lugar de la mantilla, una pamela (para bodas de día) o un tocado (para bodas de tarde), lo cual le dará un aire sofisticado y elegante.

¿Hay alguna tendencia 'prohibida' para madrinas?

Quizás no podríamos hablar de prohibidos como tal, porque hoy en día las tendencias experimentan rompiendo protocolos y tradiciones, pero quizás sí podríamos hablar de piezas, cortes o telas que no quedan bien con la mantilla, como las faldas muy cortas, los brillos o los escotes palabra de honor.

¿Cuál es el principal consejo que darías a una madrina o madre de novia que comienza a buscar vestido para la boda de su hijo/a?

Lo más importante es que busquen un diseñador que les dé confianza para crear el vestido ideal para la ocasión. El diseñador siempre les aconsejará el corte y los colores que les sienten mejor, ya que su objetivo es crear un diseño que favorezca a su clienta.

Vestidos lisos de madrina que marcan cintura y estilizan la figura

¿De qué manera influyen las novias en la elección de los vestidos de sus madres y las madrinas?

Eso depende de las novias, de las madres y de las madrinas. De su personalidad, de su carácter... Hay novias, madrinas y madres a las que les encanta tomar decisiones juntas, mientras que hay otras que prefieren diseñar su vestido ellas solas. Claro que es una experiencia muy bonita compartir en familia este proceso. Mi consejo es que cada una se ponga en manos del diseñador que le dé confianza, que sepa captar la esencia de lo que desea crear para el día de la boda.

¿Cuál es la mayor duda que tienen las madrinas cuando van a tu atelier?

Independientemente de nuestra edad, a todas nos gusta vernos jóvenes, favorecidas y esbeltas, ya seamos novias, madrinas, madres o invitadas. Para asegurarnos de que todas ellas, y en especial la madrina, se vean favorecidas elegiremos aquellos diseños que realcen su belleza natural y su figura.

¿Qué tipo de diseños son los más favorecedores para mujeres que quieren verse elegantes, pero sin echarse años encima?

No podemos hablar de un diseño universal para lucir joven y esbelta, porque cada cuerpo es único y cada uno tiene un corte ideal. Con cada clienta, tratamos de encontrar los cortes que realcen su figura, eligiendo los tejidos que creen el mejor efecto dependiendo de lo que se quiera conseguir. Como guía, podríamos decir que los tejidos fluidos como la muselina de seda, satén o crepe de seda aportan vuelo y movimiento.

¿Cómo es el proceso de creación de un vestido para madrina o madre de la novia?

El proceso es el mismo para todas nuestras clientas. Primero debemos conocernos, asegurarnos de que nos entendemos y que nos damos buenas vibraciones mutuamente. Comentaremos temas del estilo que se busca, los colores preferidos y los que le sientan mejor, los gustos y tejidos, cortes y accesorios. Así logramos establecer una relación de confianza, en la que se intercambian deseos y propuestas. Una vez comprendidos los deseos de la clienta procedemos a dibujar un boceto del diseño, y hacemos las modificaciones necesarias sobre el papel hasta que la clienta esté segura de que hemos entendido su idea original. En una visita posterior, habremos confeccionado la toile, que es, digamos, el esqueleto del vestido, sobre el que construiremos el vestido real, y sobre el que se harán todas las modificaciones y ajustes.

También es importante si queremos lucir ese día algún complemento o piezas de joyería de gran valor sentimental, nuestro consejo es que, si tienen este tipo de piezas, lo tengamos en cuenta desde la primera visita, para que podamos integrarlas con la consideración que merecen en el diseño desde el principio.

¿Qué le dirías a aquellas mujeres que no son capaces de imaginarse el vestido hasta que no lo ven ya creado?

Les diría que confíen en el diseñador que han elegido, y que se dejen aconsejar. Aquellas mujeres a las que les cuesta imaginarse el resultado final, suelen disipar esas dudas en el momento en el que se prueban la toile, pues ésta sirve, precisamente, para ir vislumbrando cómo será el vestido acabado.

¿Qué es lo más bonito de acompañar a una madre o madrina en el proceso de creación de su vestido?

Nosotras disfrutamos creando con cada una de nuestras clientas, desde el primer boceto hasta el resultado final. El proceso es emocionante y divertido, viendo como el vestido va evolucionando en cada prueba y, sobre todo, la satisfacción de ver que nuestras clientas se sienten seguras y elegantes con sus vestidos, y que afrontan el día de la boda con ilusión y emoción.

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¿Qué tendencias de invitada van a triunfar este año?

Este año vuelven los corpiños, más o menos marcados, los cuerpos ajustados, el talle centrado, y faldas con mucho vuelo que sientan bien a casi todas. También veremos los talles bajos, cortados a una cadera muy ajustada.

¿Cómo crees que ha evolucionado la moda de invitada en los últimos años? ¿La gente se preocupa más por los looks?

Sí hemos notado que las invitadas en general se preocupan más por su atuendo a la hora de vestirse para una boda. Ahora hay más variedad en los diseños y en las propuestas, y cada vez se pone más esfuerzo. Esto se debe parcialmente a querer ser original y llamar la atención por su estilo en el vestir, pero también depende del deseo de adecuar su estilismo al tipo de celebración al que van a acudir; si es una ceremonia religiosa o civil, si la celebración será en el campo o en una finca, o de si es en Cantabria o en Cádiz. Las invitadas más jóvenes han introducido en los estilismos de boda piezas que antes no se llevaban, como los pantalones palazzo, los monos y los zapatos de plataforma muy altos, que no son más que elevar las tendencias actuales en el vestir a una ocasión de máxima etiqueta. Pero, aunque parezca que ahora todo se puede, me permito sugerir que no se pierda de vista el protocolo establecido.

¿Crees que los protocolos en las bodas se van relajando o a la gente le sigue gustando seguirlos a rajatabla?

Creo que hoy en día, con la popularización de las bodas civiles, se ha introducido una nota de informalidad a las bodas. Me refiero a las novias que se casan con un estilo más relajado y que huyen de la rigidez de la máxima etiqueta para sus invitados.

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