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En su primera jornada, Fashion Week Madrid ha tenido un hueco muy especial para el compromiso solidario. Desde el Museo del Ferrocarril y con la presencia destacada de Begoña Gómez entre las invitadas, la diseñadora Juana Martín decidió mostrar sus novedades en un desfile benéfico cuya recaudación iba destinada íntegramente al Proyecto sobre Cáncer de Mama y embarazo del Grupo GEICAM, que investida en más de 184 hospitales de toda España. Sobre la pasarela, unas creaciones que, a diferencia del resto de diseñadores, no son para primavera-verano 2019, sino que forman parte de su colección Crucero 2019.
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Blanco, gris y negro, solo estos tres colores fueron los utilizados por la diseñadora cordobesa en esta ocasión. Como prendas, el vestido, que domina casi en su totalidad una colección en la que juega con las asimétricas, los detalles calados, las transparencias y una estética romántica. Como género, el encaje, que se combina con gasas y adornos de plumas, así como grandes pamelas de rafia, un guiño al exitoso Jacquemus y que sirve de sutil contraste a la paleta cromática que dominó la presentación.
