Un vestido (multi)tendencia o la inversión de Olivia Palermo perfecta para siluetas rectas

La Semana de la Moda de París, la última dentro del marco de las fashion weeks que dominan el mes de septiembre, ha dado el pistoletazo de salida con el desfile de Dior. Una de las citas más esperadas del calendario donde, como suele ser habitual, las primeras filas han estado ocupadas por algunas de las actrices, modelos e iconos de estilo más influyentes de la industria: Karlie Kloss, Jennifer Lawrence, Chiara y Valentina Ferragni, la influencer y diseñadora francesa Jeanne Damas... Junto a ellas no podía faltar Olivia Palermo, habitual desde hace años en los desfiles de la maison. La empresaria ha apostado por un conjunto muy distinto al del resto de invitadas, que se han decantado por diseños más elaborados, con tonalidades, siluetas y cortes más cercanos a los looks de noche. Sin embargo, la opción escogida por Olivia resulta idónea para renovar un look de trabajo sin tener que apostar por las mezclas más habituales.

Peinada con un moño pulido de raya lateral y con un maquillaje discreto que enfatiza la mirada, la diseñadora ha cedido todo el protagonismo al vestuario. Aunque los vestidos cortos no siempre funcionan en un look de trabajo, la propuesta con estampado de cuadros rojos y negros elegida por Olivia resulta perfecta para adaptarla a estilismos que implican un dress code más elaborado. La prenda, firmada por Dior, está confeccionada en lana e incorpora en el mismo diseño varias tendencias. Por un lado, la parte superior, rematada por un cuello de solapas y cierre de cremallera que se alarga hasta el bajo, se asemeja a los polos de inspiración deportiva que modelos como Kendall Jenner llevan con frecuencia en sus looks de calle. Por otro, el vestido incorpora un cinturón que ayuda a estilizar la silueta y romper con su rectitud, destacando sutilmente las curvas. Un detalle que no suele formar parte de los conjuntos de la empresaria, siempre a favor de las prendas fluidas. La falda proporciona cierta sensación de volumen gracias a los volantes, culminados con flecos que ayudan a potenciar la sensación de movimiento. 

Sobre la pasarela el vestido se combina con un maxicinturón de piel y unas botas de caña media, pero la experta en moda lo ha adaptado a su estilo y ha optado por unas botas over the knee. Un modelo en color negro con cremallera frontal y tacón cómodo, de Gianvito Rossi. Sin grandes accesorios, Olivia logra romper con el dúo cromático rojo y negro combinando el vestido con una camiseta blanca de cuello redondo, una alternativa al diseño oscuro con el que se completó el look en la colección para este Otoño/invierno que María Grazia Chiuri subió a la pasarela. Después de dejarse ver en Nueva York y Milán, la empresaria regresa a París, donde tiene varios compromisos profesionales que atender, entre ellos el desfile de Valentino y Giambattista Valli, dos de sus citas imprescindibles.