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Si quieres disfrutar de mañanas relajadas y con menos prisas necesitas organizar bien el armario o el vestidor. Tener tu ropa y complementos en orden te ayudará a encontrarlo todo a la primera, a saber qué tienes y qué te falta, y a arreglarte de forma más tranquila y agradable. Para conseguirlo, nada como saber qué elementos y accesorios necesitas para cada tipo de prenda. Estos son los esenciales de los armarios más ordenados.

 

Planificar el interior

Tanto si vas a remodelar por completo el armario como si solo quieres hacer unas cuantas mejoras, es importantísimo planificar el interior en función de las cosas que tienes que guardar. ¿Compartes el armario o es solo para ti? ¿Tienes muchos vestidos y prendas largas? ¿Te encantan los zapatos y tienes pares y pares?

Analiza tus cosas, tus gustos y necesidades para establecer qué tipo de espacio interior necesitas en tu armario. De esta forma conseguirás más orden y funcionalidad. El espacio ha de estar bien distribuido y ofrecer un hueco o espacio para cada tipo de prenda. Piensa que tendrás que poner barras para colgar las perchas, cajones, módulos extraíbles, etc.

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Elige las barras para colgar

Una (o varias) barras para colgar la ropa que va en perchas es imprescindible en cualquier armario. La clave está en averiguar cuál ha de ser su longitud y la altura a la que debemos instalarla. Por regla general necesitarás un hueco de unos 170 cm para los vestidos y abrigos largos, y uno de aproximadamente 105 cm para chaquetas, americanas, camisas, etc.

Un consejo: si quieres aprovechar la parte más alta del armario, puedes instalar una barra abatible. Cuenta con un mecanismo manual que te permite bajar la barra para colgar y descolgar las perchas, subiéndola después con facilidad.

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Cajones, ¿sí o no?

Existen varios sistemas para guardar prendas que no van colgadas en perchas, como las camisetas, los jerséis o la ropa interior. Puedes optar por cajones, por baldas o por bandejas o cestas extraíbles.

Aunque todo depende de tus preferencias, es buena idea contar con al menos dos de estas soluciones y no elegir solamente una de ellas. Los cajones son adecuados para las prendas más pequeñas y para lo que no quieres que quede a la vista. Elige cajones con guías de calidad para que se deslicen fácilmente y con sistema de freno para que cierren con suavidad. Esto, además, hará que te duren más tiempo sin estropearse.

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Accesorios para el interior de los cajones

De nada te servirá disponer de grandes cajones en tu armario si el interior está descolocado y revuelto. Se convertirán en una auténtica pesadilla cada mañana. Lo mejor para resolver el problema es contar con los accesorios adecuados para distribuir correctamente el espacio interior y compartimentarlo: de esta forma las prendas más pequeñas no se mueven ni se mezclan unas con otras. Puedes utilizar cajas de poca altura y distintos tamaños, separadores o divisores de cajón, etc.

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Baldas y estantes

En lo que se refiere a la organización del interior de tu armario puedes seguir al pie de la letra el método de la célebre Marie Kondo, o puedes decidir que amas las baldas y las pilas de camisetas. Si prefieres al última opción debes tener en cuenta algunas cosas que te ayudarán a organizar tu ropa con éxito. No debes hacer pilas muy altas de prendas para que no se desmoronen.

Una buena idea a la hora de elegir las baldas del interior es optar por modelos extraíbles: los estantes van colocados sobre unas guías que permiten extraerlos. De esta manera tienes más acceso al contenido y resulta más cómodo encontrar la prenda que buscas.

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Colocar los pantalones

Si quieres tener los pantalones en orden dentro de tu armario puedes colgarlos en perchas, aunque te ocuparán un espacio considerable. Estas prendas quedarán mejor ordenadas en un accesorio pantalonero que puedes instalar en la parte baja del armario, y evitarás que te roben espacio en la barra. Tienes modelos extraíbles, muy cómodos, y con capacidad para distinto número de pantalones. Con este accesorio los pantalones no resbalan y están siempre en orden.

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¿Cómo organizar los complementos?

Gafas de sol, cinturones, relojes, pañuelos… y un largo etcétera de complementos. Son muchas, y muy diferentes, las cosas que hay que guardar en el armario o el vestidor. Para estos elementos pequeños existen soluciones que te vendrán de perlas.

Se trata de bandejas extraíbles especialmente diseñadas para este tipo de objetos. Tienen poca altura, por lo que se adaptan a huecos pequeños en los que no cabe un cajón normal, y resultan muy prácticos.

Un consejo: elige bandejas para complementos con el interior revestido en fieltro. Así no se estropearán tus cosas ni se rayarán las gafas de sol o los relojes.

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¿Y los zapatos?

Una distribución de interior de un armario no sería perfecta si no dedicase un espacio para el calzado. Destina un hueco para organizar los zapatos por su tipología: el calzado deportivo, los zapatos planos, los de tacón, las botas, etc.

Tendrás que buscar el accesorio que mejor te ayuda a colocarlos y a mantener el orden. Pueden ser baldas extraíbles o fijas. Las primeras resultan más cómodas. También hay modelos extensibles que pueden hacerse más grandes o más pequeños en función del espacio disponible en el armario.

Un consejo: coloca en el lugar más accesible los zapatos que utilizas con mayor frecuencia.

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Un colgador extra

Aunque con todos los accesorios que hemos explicado hasta ahora tu armario estaría ya muy bien equipado, nunca viene mal contar con un colgador para colocar, por ejemplo, en la parte interior de las puertas. O en un lateral dentro del armario.

Un colgador con ganchos donde puedas tener a mano bolsos, cinturones, pañuelos y fulares, etc., resulta de lo más práctico. Esta idea es especialmente interesante cuando el espacio escasea y se hace necesario aprovechar la máximo hasta el último centímetro.

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