Descubre la mejor forma de tender la ropa para que quede perfecta
Así apenas se arrugará y tendrás que planchar menos
Hacer la colada no consiste en meter la ropa en la lavadora de cualquier manera y tenderla después a lo loco. Es un proceso que, si se realiza con cierta técnica, puede facilitarnos mucho la tarea.
Por eso llega el momento de revisar si tu manera de tender la ropa es la correcta. Esto, lejos de ser una banalidad, puede ahorrarte mucho tiempo y esfuerzo a la hora de realizar una tarea ya de por sí ingrata: planchar.
Por qué es importante tender bien
Puede que durante el invierno uses mucho la secadora. Desde luego, es un elemento muy práctico que nos facilita mucho la tarea de hacer la colada.
Sin embargo, con la llegada del verano y el buen tiempo puedes prescindir en ocasiones de este electrodoméstico y tender al sol, siempre que dispongas de un espacio para hacerlo. Así consumirás menos energía, ahorrarás en la factura y protegerás el medioambiente.
Como primera recomendación, no dejes la ropa mojada en la lavadora durante mucho tiempo. Se arrugará y cogerá mal olor a causa de la humedad.
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Organiza la colada antes de colgarla
Uno de los errores que más se suelen cometer a la hora de tender la ropa es ir cogiendo prendas de la lavadora y colgándolas según salen. La manera correcta de hacerlo requiere preparar un poco la ropa para tenderla correctamente.
Quizá pienses que es una pérdida de tiempo, pero en realidad es una inversión, ya que después planchar te costará mucho menos.
- Para empezar, no debes tenderla demasiado mojada porque se deformará. Esto suele ocurrir con las prendas que lavamos a mano, y que se deben dejar escurrir antes de tender.
- Es importantísimo que tiendas las prendas bien estiradas para lo que tendrás que sacudirlas. De esta manera se arrugan mucho menos y la plancha será coser y cantar.
- Estira bien las mangas de camisas y camisetas, y también la ropa interior y los calcetines.
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Una regla de oro: tender del revés
Si te has propuesto hacer la colada como un autentico profesional, has de tener claro que debes procurar en lo posible que la ropa no sufra. El proceso de lavado, secado y planchado puede llegar a ser muy agresivo para tus prendas, por lo que no está de más procurar hacerlo de la manera adecuada.
Comienza por tender la ropa del revés, para evitar así que el sol estropee los colores. Estos es especialmente importante con la ropa oscura o de colores intensos, aunque puedes tomarlo como una recomendación general para todas las prendas.
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Deja espacio entre las prendas
Ya sabemos que la falta de espacio es un problema en la mayoría de las casas actuales en general, y en los tendederos en particular. La ropa sucia se multiplica, las lavadoras admiten cada vez más carga, pero las cuerdas para tender son limitadas…
Aunque así sea, apelotonar la ropa tendida no es la solución: el aire no corre entre las prendas y se secan peor. Trata de darles el espacio que merecen.
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¿Sabes cuáles son las mejores pinzas para la ropa?
Son un elemento imprescindible a la hora de tender la colada y conviene elegirlas bien. Hay a quienes les encantan las pinzas de madera, mientras que otros prefieren las de plástico o, incluso, las metálicas.
Los expertos recomiendan las pinzas de plástico porque dejan menos marcas en la ropa. Es importante colocarlas en las costuras, así como utilizar una o dos por prenda y no compartir una pinza para dos prendas, ya que se secarán peor.
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Si está seca, recógela cuanto antes
Esta es otra equivocación bastante frecuente: tendemos la colada, la ropa se seca (en verano apenas tarda unas horas) y nosotros seguimos con nuestras tareas olvidándonos de recogerla.
Cuando lo hagamos, si hemos dejado pasar mucho tiempo, la ropa estará acartonada y tiesa. Dará igual si has puesto suavizante en la lavadora o no.
Mejor no te retrases demasiado a la hora de recogerla y dóblala un poco antes de separar la ropa de plancha del resto.
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A cada prenda, su técnica de colgado
En el capítulo sobre cómo hay que tender cada tipo de prenda, vas a encontrar numerosos consejos, muchos de ellos contrapuestos. Lo que a unos les funciona, a otros les parece una barbaridad.
Por eso hoy vamos a dar unas recomendaciones generales que tú puedes adaptar a tu gusto. La experiencia te dirá si aciertas o te equivocas y cómo encontrar la manera ideal de tender.
- Ropa de cama: son las prendas más grandes que tendrás que tender. Si no puedes colgarlas totalmente estiradas, dóblalas primero a la mitad.
- Camisas y vestidos: cuélgalos en perchas y no se deformarán.
- Pantalones: se ponen con la cinturilla hacia abajo, ya que pesa más y eso hace que se estiren.
- Faldas: por la cinturilla y colocando las pinzas en las costuras.
- Prendas delicadas: la ropa de lana o punto se tiende en horizontal, sin pinzas, para que no se deforme.
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El mejor tendedero
Si no cuentas con una azotea amplia en la que tender tu ropa al sol, necesitarás un tendedero en el que colgarla, ya sea dentro de casa o en una terraza.
Y como tender la ropa es una tarea básica que todos debemos realizar, el mercado te ofrece diferentes soluciones para que puedas elegir la mejor para ti.
- Tendedero de pie. Es uno de los modelos más comunes en todas las casas, yas que ofrece un espacio extra para tender, lo que nunca viene mal. Además, como son plegables, se pueden guardar en cualquier rincón cuando no se usan.
- Tendedero de techo. Una de las ventajas, seguramente la más importante, de este tipo de instalaciones para tender es que no ocupan espacio, ya que se instalan prácticamente pegados al techo. Las cuerdas suben y bajan y tender es facilísimo.
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Perfectos para la terraza
Si tienes un balcón o una terraza, aunque no sea muy espaciosa, puedes tender tu ropa al sol, ya que existen soluciones prácticas que te ayudan a conseguirlo sin perder orden.
- Como los tendederos que se cuelgan en la barandilla del balcón: resultan muy prácticos y, aunque no son para colgar mucha ropa, pueden sacarte de un apuro.
- También son funcionales los modelos de pared, extensibles. Se fijan con tacos y tornillos y se extienden para colgar la ropa. Una vez seca y recogida, se vuelven a plegar y no ocupan nada de espacio. Todo un acierto.
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