Kim Kardashian convence: la sombra más poderosa se llama 'Libra'

Muchas han sido las veces en las que parecía que una de las tendencias de maquillaje más ochenteras volvía para quedarse… y al final solo se trataba de una fugaz falsa alarma. Pero, ¿qué pasa cuando Kim Kardashian y la mismísima Oprah decretan que aplicar el color del cielo sobre los párpados se lleva? Pues que solo es cuestión de tiempo que los tocadores de medio mundo comiencen a contar con un maquillaje de ojos azul celeste, turquesa, índigo, cerúleo o añil. ¿Otra buena razón para enamorarse de este color que consigue que la mirada parezca más descansada y luminosa? Que dos ángeles de Victoria´s Secret ya han caído presas de sus encantos: Blanca Padilla y la holandesa Sanne Vloet.

Libra es el nombre de uno de los tonos de la nueva paleta que la más famosa de las Kardashians ha creado junto a su maquillador por excelencia, Mario Dedivanovic. Este azul cobalto metalizado se ha convertido en el protagonista de la fiesta de presentación de la colaboración ya que Mario pidió a todos los asistentes que aparecieran con los ojos maquillados de este color. Además, la presentadora estadounidense Oprah Winfrey, una de las mujeres más poderosas del mundo según la revista Forbes, acudió al estreno de su película ‘Un pliegue en el tiempo’ con un maquillaje de ojos azul índigo que resaltaba su mirada debajo de una de sus icónicas gafas de pasta.

El azul es un color que favorece mucho a las mujeres con el iris marrón ya que, al ser tonos complementarios, el primero consigue que el segundo vibre por contraste. Además, otra propiedad de este color es que ilumina el blanco de los ojos al acentuar los subtonos fríos del globo ocular que se muestra más amarillo o rojizo cuando no se ha descansado correctamente. El nuevo tono de moda puede convertirse en un salvavidas esas mañanas en las que se nota que las pocas horas de sueño han pasado factura. 

El mejor truco para principiantes que se aventuren con esta tendencia consiste en aplicar máscara de pestañas negra, tanto en las inferiores como en las superiores, para enmarcar bien la mirada y reducir el impacto cromático que supone dejar únicamente al azul como centro del look. Otra forma de llevar este color sin que resulte demasiado llamativo es en forma de eyeliner al rellenar con un lápiz de ojos de cualquier tonalidad de azul la línea de agua y mantener el resto del maquillaje en tonos neutros.