Si eres amante de la belleza y la moda, sabrás que cada año Pantone nos revela cuál será el color estrella que inundará nuestro nuevo año. Para 2026, la elección ha sorprendido a muchas: el protagonista esCloud Dancer, un blanco roto que promete ser la base perfecta para looks minimalistas y sofisticados, y que ya está empezando a aparecer en los primeros diseños de las uñas con más estilo.
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Lo divertido de los colores tendencia no es solo admirarlos, sino aprender a incorporarlos en nuestro día a día. Y en el caso de Cloud Dancer,su versatilidad lo hace ideal para sumarlo a la manicura: elegante, combinable con cualquier tono y perfecto tanto para quienes aman la discreción como para las que quieren arriesgar con detalles únicos y creativos.
Un blanco roto que se mueve entre la sutileza y la sofisticación. No es un blanco puro ni demasiado frío; tiene un matiz cálido que lo hace agradable a la vista y fácil de combinar. Su atractivo radica en que refleja luz y suavidad, aportando un toque elegante y moderno a cualquier diseño. Este tono se ha convertido rápidamente en un imprescindible de la manicura, ideal para quienes buscanun acabado limpio sin perder estilo.
Funciona en uñas de cualquier largo y forma, desde las más cortas y discretas hasta las largas y estilizadas. Es un color que favorece a todas y combina con casi cualquier outfit, maquillaje o accesorio. Además, su neutralidad permite jugar con contrastes, texturas y pequeños detalles, haciendo que cada manicura se vea cuidada y sofisticada sin esfuerzo. Su principal ventaja es que es atemporal y adaptable, ideal tanto para el día a día como para eventos especiales.
La versión clásica del Cloud Dancer es sencilla pero impactante: el tono aplicado tal cual, sin adornos. Su encanto está en la pureza y la luminosidad del color, que aporta elegancia y seriedad inmediata. Es perfecta para quienes buscan una manicura minimalista pero con personalidad, ya que transmite modernidad sin necesidad de complicaciones.
Si quieres algo más creativo, la francesa reinventada es una opción espectacular. Mantén la base en Cloud Dancer y juega con la punta en un color en contraste, como naranja o morado. Esta versión da un giro moderno a la clásica manicura francesa y añade un toque divertido sin perder sofisticación. Es ideal para quienes desean algo original pero aún discreto.
Para un acabado más glamuroso, el Cloud Dancer con efecto perlado es imbatible. La textura nacarada aporta dimensión a la uña, reflejando luz y creando un look más llamativo sin dejar de ser elegante. Este efecto es perfecto para quienes quieren un toque sofisticado y delicado, ideal tanto para el trabajo como para eventos especiales, y mantiene la suavidad característica del color.
Otra tendencia interesante es combinar Cloud Dancer con tonos marrones. Cada uña puede tener un tono distinto, desde el blanco roto hasta marrones profundos, creando un degradado irresistible. Esta técnica da un efecto cálido y armonioso, que combina perfectamente con outfits invernales o neutros. Además, permite experimentar con diferentes acabados, pero sin perder la elegancia del blanco roto.
No siempre hay que cubrir la uña completa con Cloud Dancer. También se puede usar en detalles artísticos, como ondas, líneas o puntos sobre bases nude, doradas o en armonía con otros tonos suaves. Este enfoque permite que el color estrella destaque sin saturar, haciendo que cada uña sea una pequeña obra de arte. Es ideal para quienes disfrutan de una manicura creativa, moderna y única.
Para lograr una manicura perfecta con Cloud Dancer es clave seleccionar un blanco roto verdadero, no un blanco clásico puro. Aunque el matiz puede variar ligeramente según la marca, la esencia es la misma: un color cálido, elegante y fácil de combinar. La elección correcta hará que cualquier diseño de manicura en esta tonalidad luzca profesional y armonioso.
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413 Desert Ivory, de Semilac
El blanco roto perfecto para cualquier manicura elegante y sofisticada. Su acabado impecable y cremoso permite una cobertura uniforme en pocas capas, ideal para quienes buscan un look natural pero con estilo. Además, su versatilidad hace que combine con cualquier diseño, desde la clásica francesa hasta detalles artísticos más atrevidos. Precio: 10,99 euros.
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Milky White, de Manucurist Paris
Su fórmula cremosa asegura una cobertura uniforme y un acabado profesional sin esfuerzo, mientras que su alta pigmentación permite que el color destaque notablemente. Además, es un esmalte versátil que se adapta a cualquier longitud de uña y estilo de manicura, desde diseños minimalistas hasta detalles artísticos más atrevidos, convirtiéndose en un básico esencial. Precio: 14 euros.
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Esmalte Semipermanente Milk Shake, de Neonail
El aliado perfecto para quienes buscan un blanco roto con acabado delicado y duradero. Su fórmula semipermanente garantiza una resistencia prolongada, evitando roturas y manteniendo las uñas impecables durante semanas. Además, ofrece cobertura uniforme y fácil aplicación, ideal tanto para manicuras minimalistas como para diseños más creativos. Precio: 10,99 euros.
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Blanc 01, de Essie
Un clásico reinventado que ofrece un blanco roto intenso y elegante, ideal para manicuras limpias y sofisticadas. Su pincel ancho y flexible permite una aplicación rápida y precisa, logrando una cobertura uniforme en una sola pasada. Además, su fórmula de secado rápido y alta duración asegura uñas impecables durante días, mientras que su tono versátil se adapta a cualquier estilo. Precio: 6,99 euros.
