Más allá de las carreras, la Fórmula 1 es sinónimo de estrellas del deporte, del mundo del espectáculo, de la moda, de los negocios o de todo aquello que brilla más de lo normal y tiene mucha purpurina a su alrededor. Si además nos encontramos en uno de los países más ricos del mundo, en este caso gracias al petróleo y el gas natural, pues la ecuación resulta perfecta. El Gran Premio de Catar de Formula 1 se convertía este domingo en una auténtico desfile de VIPs de talla internacional, de Jessica Alba a David Beckham, todos ellos dispuestos a disfrutar 'in situ' de la competición de coches más rápidos del planeta.
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La actriz de Hollywood se lo pasó en grande y la veíamos junto a la espectacular top model Rosie Huntington-Whiteley, además de charlar animadamente con la guapísima piloto española Carmen Jordá, quien actualmente trabaja para la escudería francesa Alpine. Tampoco quisieron perderse esta cita en el circuito internacional de Losail el laureado tenista serbio Novak Djokovic, el chef británico Gordon Ramsay, el jugador de la NBA Anthony Davis, el cantante de la mítica banda Metallica, James Hetflieed, el actor norteamericano Kevin Hart (quien ondeó la banderola de cuadros), el exfutbolista inglés Rio Ferdinand, DJ y productor musical estadounidense Swizz Beatz, la presentadora Maya Jama, el atleta Mutaz Barshim o el presidente de la FIFA Gianni Infantino, entre muchos otros.
Durante su estancia allí, la mayoría aprovecha para darse un paseo por el 'paddock', saludando a los corredores y a sus equipos para conocer cómo funciona por dentro este circo tan apasionante. Incluso, otros como el ganador de 24 Gran Slams se atreven incluso a dar clases de gimnasia y yoga, como hizo el pasado sábado sobre el asfalto y regalándonos así uno de los vídeos del fin de semana que más se ha viralizado. En el mismo, 'Nole' ejercía de monitor para un reducido grupo de personas, entre ellos el piloto argentino Franco Colapinto. Este, sin embargo, no pudo seguir el ritmo del deportista balcánico y, de forma un tanto cómica, se le vio con dolores de espalda.
En lo que al resultado de la prueba se refiere, los nervios estaban a flor de piel ya que era la penúltima cita del calendario y el título aún está por decidir. El neerlandés Max Verstappen, de Red Bull, se subía a lo más alto del cajón y dejaba a los McLaren de Oscar Piastri y Lando Norris por detrás. De esta forma, la clasificación está más apretada que nunca y habrá que esperar solo unos días, al Gran Premio de Abu Dabi que se disputa del 5 al 7 de diciembre en Yas Marina, para saber quién se convierte en el flamante campeón de 2025. Las espadas están en todo lo alto, por lo que se vienen emociones fuertes que seguro harán las delicias de los aficionados.
Carlos Sainz Jr., por su parte, dio la gran alegría a los seguidores españoles tras su magnífico tercer puesto en la pista catarí, colándose entre los mejores cuando nadie lo esperaba (y repitiendo así su mejor puesto de la temporada). Lo vimos por lo tanto bañarse en champán sobre el podio, con una sonrisa de oreja a oreja (y no era para menos). Allí, apoyándole de manera incondicional, estuvo su padre, el mítico piloto de rallies Carlos Sainz. "El inicio del año fue duro, pero él se crece bajo presión y al final poco a poco ha ido conociendo mejor el coche, encarrilando una serie de buenos resultados", decía este orgulloso ante la prensa cuando le preguntaron por su hijo.