En medio de la tormenta mediática desatada por la publicación de las memorias de Mar Flores y de la complicada situación familiar de los Costanzia, Alejandra Rubio y Carlo han encontrado en Italia un verdadero refugio. Un viaje muy especial por tierras piamontesas, para disfrutar de unos días de calma entre naturaleza, chapuzones y paseos familiares, acompañados por su bebé y por Bruno, el hermano menor de Carlo. Italia, familia, pasta, corazón y sombrilla. Con estos cinco emojis el actor resumía la escapada en redes, mientras que Alejandra desvelaba el rincón que les ha robado el corazón: el Lago Sirio, uno de los paisajes naturales más bellos del Canavese, a pocos kilómetros de Turín. “Tengo claro que este rincón voy a seguir visitándolo cada vez que mi agenda me lo permita”, confesaba emocionada.
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Ubicado muy cerca de Ivrea, a menos de una hora de Turín, el Lago Sirio es el mayor de los cinco lagos glaciares de la zona. Aguas cristalinas, embarcaderos de postal y un entorno en plena naturaleza han sido el escenario de chapuzones, paseos familiares y jornadas de descanso. Una burbuja de serenidad a la que Alejandra y Carlo han querido poner banda sonora con las imágenes más tiernas de su álbum privado.
La pareja viajó hasta Turín también para reencontrarse con parte de la familia de Carlo. Muy unido a sus hermanos, el actor y modelo ha podido compartir tiempo con Bruno, el más joven, en un momento en el que necesita referentes cercanos tras la condena de sus otros dos hermanos, Rocco y Pietro, por intento de homicidio.
El apoyo de Alejandra
Con todo, el viaje ha sido mucho más que unas vacaciones. Carlo atraviesa un tiempo de reconstrucción personal en el que Alejandra se ha convertido en pieza clave. Lo resumía con ternura su madre, Mar Flores: “Alejandra ha sido lo mejor que le ha pasado a mi hijo en los últimos años”. Y es que la hija de Terelu Campos ha estado a su lado incluso en los momentos más delicados.
El propio Carlo lo reconocía en televisión: “Es muy difícil encontrar a una persona que esté en los malos momentos”. Y, al hablar de ella, no podía contenerse: “¿Por qué tengo que decir tres cosas cuando diría diez mil?”. Desde que se conocieron, la vida del actor ha dado un giro. Alejado de las malas compañías y de la noche, se ha centrado en su familia y en disfrutar de cada instante. No esconde que su pasado le pesa, pero afirma con orgullo sentirse fortalecido por todo lo vivido.
Alejandra y Carlo comenzaron su relación a principios de 2024, convirtiéndose en la pareja sorpresa de la temporada. Al principio, su discreción marcó la relación, hasta que en junio dieron una noticia que nadie esperaba y que compartieron en exclusiva con ¡HOLA!: “Vamos a ser padres”. Su hijo, el pequeño Carlo, nació en diciembre de 2024 y desde entonces la pareja ha estado volcada en él. Este viaje a Italia es, de algún modo, una escapada de reflexión y distancia, pero también la confirmación de que su amor sigue fortalecido mientras se estrenan en la paternidad.
Alejandra ante las memorias de Mar Flores
El idilio italiano coincidió con la publicación de 'Mar en calma', el libro en el que la modelo se sincera sobre algunos de los momentos más difíciles de su vida. Una obra que ha devuelto a la actualidad temas delicados de su pasado y que inevitablemente ha salpicado a la familia Costanzia. Preguntada por ello, Alejandra se mostró clara: “Tengo una relación buena con mi suegra, pero no una relación que se base en comentar nada de estas cosas que no me pertenecen ni he vivido. Nunca entraría en esto”.
Y añadía: “Lo leí hace una semana y pico antes de que saliera. Me parece complicada y todo el mundo tiene derecho a contar la historia que quiera”. Lejos de alimentar la polémica, la colaboradora quiso poner el foco en lo que sí le afecta: su presente y su familia. “Yo enseño a mi hijo cuando yo quiero. Nunca voy a beneficiar un conflicto entre la familia de mi pareja y Carlo”, aclaraba, defendiendo con firmeza la privacidad del pequeño.
El cariño de Mar Flores
Pese al revuelo, Mar Flores ha querido dejar clara su relación con Alejandra, a quien ha descrito como “una chica estupenda, lo mejor que le ha pasado a mi hijo en los últimos años”. Y en lo relativo a su nieto, no se contenía: “Estoy segura de que este bebé ha venido a ser un nexo, a mejorar la vida de toda la familia. Cuando tengo en brazos a mi nieto, siento una ternura infinita”. Unas palabras que confirman lo que las fotos italianas dejan entrever: Alejandra y Carlo se encuentran en una etapa de plenitud personal y familiar.