Este sábado, Terelu Campos ha vivido uno de los momentos más emotivos de su trayectoria televisiva. La comunicadora, que recientemente ha ganado el cariño del público gracias a su paso por Supervivientes, se ha estrenado como presentadora de Aires de Fiesta, una sección dentro del programa veraniego Fiesta, en la que se rinde homenaje a figuras inolvidables de la música y la interpretación en nuestro país. Y lo ha hecho, como no podía ser de otra forma, con una mirada muy personal y cargada de emoción al pasado, en un formato que recuerda inevitablemente al programa que tantas alegrías dio a su madre: ¡Qué tiempo tan feliz!
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Con la elegancia y profesionalidad que siempre la han caracterizado, Terelu arrancó la sección repasando la trayectoria de Julio Iglesias. La música del icónico artista llenó el plató gracias a las voces de Guillermo Martín y Mercedes Durán, exconcursantes de Operación Triunfo que ya formaron parte del universo musical de María Teresa Campos. “Allí fuimos felices e hicimos muy felices a muchos espectadores de Telecinco”, confesó Terelu, visiblemente emocionada, al recordar aquellos años junto a su madre.
El ambiente nostálgico, sumado a la conexión tan especial que siempre la ha unido a la televisión, acabó por desbordar sus emociones. Con la voz entrecortada y lágrimas en los ojos, la presentadora se fundió en un abrazo con Mercedes Durán mientras decía: “¡Qué recuerdos! ¡Qué tiempo tan feliz y cuánto tiempo de felicidad! Me habéis transportado a ese lugar en el que hemos pasado tanto tiempo juntos”.
Además, Terelu quiso rendir un homenaje muy especial a María Teresa con un gesto simbólico, pero lleno de significado: eligió para la ocasión unos salones que pertenecieron a su madre. “Le he pedido a Pepa, la estilista… digo ‘necesito hacer un guiño a ella’”, explicó mientras mostraba orgullosa los zapatos. El rojo, color elegido para su vestuario, tampoco fue casual. “Yo heredé de la jefa estrenar de rojo”, reveló al inicio del programa, recordando la tradición que su madre seguía cada vez que comenzaba un nuevo proyecto profesional.
Junto a César Muñoz y Álex Blanquer, sus compañeros en esta edición estival del magacín, Terelu ha demostrado que está más que preparada para liderar esta nueva etapa televisiva. Aunque no había trabajado antes con ellos, sí lo han hecho su hermana Carmen Borrego y su hija Alejandra Rubio. “He trabajado con tu hermana, con tu hija… Eres la única Campos que me quedaba”, bromeó César en un momento distendido del programa. Lejos de mostrarse nerviosa, Terelu confesó antes del estreno sentirse tranquila pero consciente de la responsabilidad: “Nervios no tengo, responsabilidad, sí. A Álex Blanquer no la conozco, pero a César sí. Alejandra y él se quieren mucho. Seguro que los tres nos vamos a llevar genial”, aseguró con naturalidad.
El regreso a la conducción televisiva no interfiere con su faceta como actriz, que sigue desarrollando en el teatro con la obra Santa Lola. De hecho, este mismo miércoles viajará a su querida Benalmádena, donde retomará las funciones. “Tengo más nervios por eso que por el programa”, admitió entre risas.
Una celebración íntima y muy especial
Tras el programa, Terelu quiso compartir su alegría con sus seres queridos en una pequeña celebración. “Se lo merecía, se lo merecía”, comentaban a su alrededor. Ella, por su parte, valoraba el momento con satisfacción: “Muy bien, muy cómoda, muy bien”. Y aunque la celebración fue breve, la propia Terelu bromeaba: “Bueno, ahora un poquito y me traigo para seguir, para estudiar”.
En este momento tan especial, en el que compagina su debut como actriz, su reciente maternidad como abuela y el regreso a un rol que le sienta como anillo al dedo, Terelu Campos demuestra que sigue brillando con luz propia… sin olvidar nunca a “la jefa”.