Este viernes 18 de julio, José Luis Martínez-Almeida y Teresa Urquijo regresaron a la finca madrileña donde celebraron su enlace, aunque en esta ocasión lo hicieron para bautizar a su hijo Lucas, nacido el pasado 3 de julio en el Hospital Universitario Nuestra Señora del Rosario. A diferencia de su emblemática boda, que contó con más de 500 asistentes, este evento tan importante para la recién formada familia ha tenido un carácter mucho más íntimo. No en vano, son escasos los detalles que han trascendido acerca de lo que ocurrió dentro de la imponente parcela, ya que todos los asistentes entraron con su vehículo particular sin dar declaraciones a la prensa allí presente.
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A media tarde del viernes comenzó el trasiego en los alrededores de la finca ubicada en Colmenar Viejo, a los pies del imponente Cerro de San Pedro, en plena Sierra de Guadarrama. El alcalde de Madrid llegó conduciendo su propio vehículo. Otro de los primeros invitados en llegar fue Juan Urquijo, hermano de Teresa y una pieza clave en el bautizo, pues es el padrino de Lucas. La pareja de Irene Urdangarin, que también estuvo presente en el bautizo tal y como ha informado LOOK, se ha volcado de lleno en esta nueva etapa como tío primerizo.
Aunque la presencia de la hija de la infanta Cristina no estaba confirmada, pues había rumores de que la pareja podría estar atravesando un pequeño bache en su relación, según el medio, Irene ha sido una de las convidadas más especiales del bautizo, apoyando y compartiendo esta faceta tan especial para su pareja. La ausencia de la sobrina del Rey en los días posteriores al nacimiento de Lucas había hecho saltar todas las alarmas, pero su presencia este viernes ha devuelto las aguas a su cauce. Juan no solo estuvo varias veces en el hospital tras el nacimiento del pequeño Lucas, sino que también visita con asiduidad la casa en la que se han instalado su hermana y su cuñado para no perderse ni un detalle de la llegada del nuevo miembro a la familia.
Un bautizo de lo más especial
Pese a las altas temperaturas registradas en la tarde del viernes en Madrid, los invitados no quisieron perderse la primera gran celebración del pequeño Lucas, un niño que ha brindado luz e ilusión a ambas familias. Si el padrino parte de la familia de Teresa, la madrina es Leticia, sobrina del alcalde, un perfil que apuesta por la discreción. Almeida es el menor de seis hermanos y tiene un total de 17 sobrinos con los que siempre ha tenido una gran conexión.
A la finca en la que ambos contrajeron matrimonio se fueron acercando en coches separados Lucas Urquijo y Fernández de Araoz y Beatriz Moreno de Borbón-Dos Sicilias, los orgullosos abuelos del niño. También al volante de su vehículo accedió Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma, que no puede estar más feliz con su bisnieto. La prima de Juan Carlos I, que está casada con Íñigo Moreno y de Arteaga y es una de las más distinguidas criadoras de caballos de pura raza árabe, está doblemente emocionada porque la finca es de su propiedad desde 1991 y para ella es muy importante que el pequeño Lucas reciba precisamente aquí las aguas bautismales. Tampoco faltó a esta celebración la otra bisabuela, Piru Urquijo, descendiente de Gregorio Marañón y una de las damas más queridas y admiradas de la sociedad madrileña.