Es imposible poner palabras al inmenso dolor que siente en estos momentos el entorno de Diogo Jota y André Felipe Silva. Los dos hermanos, ambos futbolistas, murieron la madrugada del miércoles tras salirse de la carretera el vehículo de alta gama en el que circulaban en la provincia de Zamora, a escasos kilómetros de su Portugal natal. Tras este trágico accidente, la vida ya nunca va a ser igual para su familia, que se ha reunido para dar el último adiós a los dos deportistas. El funeral se celebrará el sábado y este viernes se ha instalado la capilla ardiente en la iglesia de Sao Cosme, en la localidad lusa de Gondomar, donde sus seres queridos están recibiendo el abrazo de amigos y autoridades.
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Isabel y Joaquim, los padres de los futbolistas, han llegado devastados, con la mirada oculta bajo unas gafas de sol y vestidos con ropa oscura. Nada más bajar del coche han abrazado a personas de su entorno que lo estaban esperando para acompañarlos al interior del templo, donde estaba Rute Cardoso. La viuda de Diogo, con el que se casó hace solo diez días y con la que tenía tres hijos.
En las inmediaciones de la iglesia se ha desplegado un amplio dispositivo de seguridad para garantizar que se cumpla el deseo de la familia de vivir estos momentos tan difíciles en la más absoluta intimidad. Son muchos los curiosos que se han acercado para presentar sus respetos y trasladar el cariño a la familia a través de la distancia y en completo silencio porque en esta zona de Oporto en la que crecieron Diogo y André se respira tristeza, rabia e incredulidad.
El primer ministro de Portugal, Luis Montenegro, ha acudido junto al que fuera representante del jugador, Jorge Mendes. Más tarde, se ha visto también al presidente luso, Marcelo Rebelo de Sousa, presentando sus respetos a la familia.
El duelo por la muerte de Diogo Jota y su hermano André se extiende de Portugal a Reino Unido, donde el jugador era una de las estrellas de la Premier League. El estadio de Anfield se ha convertido en un improvisado memorial, al que los aficionados se han acercado a expresar su dolor o dejar un recuerdo. Allí hemos visto, desolado, al que fuera capitán del Liverpool, Jordan Henderson, actualmente centrocampista del Ajax de Amsterdam, que no ha podido contener las lágrimas ante el aluvión de muestras de cariño y ha querido dejar unas palabras en el libro de condolencias.
Fue en la madrugada del 3 de julio cuando Diogo Jota y su hermano André Silva perdieron la vida a causa de un accidente automovilístico mientras transitaban por una carretera en el noroeste de España, en la región de Castilla y León. Según informes de la Guardia Civil Española, el accidente ocurrió cerca de las 00:30, hora local, cuando el delantero del Liverpool y su hermano perdieron el control del Lamborghini en el que viajaban. Según las autoridades, los hermanos intentaron rebasar a otro vehículo, lo que provocó el daño de un neumático que hizo que el coche saliera de la carretera y se incendiara. Aunque los servicios de emergencia llegaron al lugar al lugar para intentar salvarlos, ambos futbolistas fallecieron.