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Durante las últimas semanas, Frank Cuesta no ha dejado de acaparar titulares. El popular naturalista continúa inmerso en una vorágine mediática que estalló el pasado mes de mayo, tras una impactante confesión ante las cámaras en la que reveló una supuesta cara oculta que hasta entonces permanecía desconocida. A raíz de aquel episodio, Cuesta se enfrentó a un serio desafío: la posibilidad de una pena de cárcel derivada de una detención policial. Ahora, ha sido el propio animalista quien ha contado públicamente cómo se ha resuelto la situación y si finalmente ingresará o no en prisión.
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Frank Cuesta se ha presentado este miércoles 18 de junio, alrededor de las 09:00 horas, en el juzgado, acompañado por su abogado. Tras la vista judicial, ha explicado en su canal de YouTube que el juicio se ha celebrado en el Tribunal Provincial de Kanchanaburi, en Tailandia, y que no ingresará en prisión. No obstante, ha sido condenado al pago de una multa de 30.000 baht (unos 800 euros) por posesión de animales salvajes sin la documentación correspondiente, evitando así la pena de cárcel que se había solicitado para él. "Bueno, hoy ha habido sentencia. Yo había dicho otra fecha para no alentar a los medios de comunicación, pero el juez ya ha dictado sentencia. Ya me han devuelto el pasaporte. Ha sido un momento liberador. Estábamos todos con el alma en vilo", ha comenzado explicando.
El aventurero leonés ha publicado un vídeo explicando cómo han ocurrido los hechos: "Quiero contaros que sí, había una sentencia. Llevamos casi cinco meses con ansiedad, con malestar, por todo lo que ha explotado alrededor y toda esta historia. Lo primero que quiero dejar claro es que, a partir de ahora, todo el salseo, todas esas historias tipo "está loco", "le gustan los calderos", "está acabado"... se terminó. No vamos a hacer declaraciones, ni a entrar en debates. Aquí lo importante son los animales, el santuario y, sobre todo, nuestra vida privada".
Posteriormente se ha centrado en el juicio: "Hoy hemos ido al juzgado. La sentencia ha salido: no tengo antecedentes penales, no hay condena de cárcel, ni nada negativo en ese sentido.La verdad es que llegué bastante asustado al juzgado. Mi abogado estaba tranquilo, pero yo no. El juez ha sido muy elegante, muy consciente del contexto. Me preguntó por qué tenía esa cara de susto, y le expliqué que para mí esto es nuevo. Me dijo: 'Tranquilo, no eres un criminal'. Me han puesto una multa de 850 euros (unos 29.000 baht) por no haber tenido los papeles en regla en su momento, y me dijo claramente: 'No te quiero volver a ver aquí. Espero que todo esté en orden'. Y sí, el abogado confirmó que ya todos los papeles están al día en el santuario".
Por último, ha querido agradecer a todos aquellos que le han mostrado su cariño durante estos difíciles momentos: "Gracias a todos los que habéis confiado, los que seguís aquí, los que entendéis que lo que hacemos no es salvar el mundo entero, pero sí mejorar el pequeño mundo de los animales que nos llegan. Tal vez sirva de ejemplo para que otros en el futuro creen santuarios abiertos, sin jaulas, sin separaciones, donde los animales convivan juntos. No es fácil, lleva tiempo, trabajo, dedicación, pero de momento el santuario funciona muy bien". Por último, ha confesado que tras esta sentencia, está más tranquilo: "Ha sido un momento liberador. Estábamos todos con el alma en vilo. Y al final, ha quedado en eso: una multa, ningún antecedente, y un buen susto. Una gran metedura de pata por no tener los papeles".
La confesión de Frank Cuesta
El pasado nueve de junio, Frank Cuesta publicaba un vídeo de 6 minutos y 28 segundos en el que confiesa sus mentiras: "Quiero disculparme públicamente con Chi y asumo completamente la responsabilidad del hate que le cayó después de mi detención. También quiero disculparme por el doxeo que ha recibido a través de otras personas, ¿de acuerdo?", comenzó. Posteriormente, relató que "he sido un personaje, y poco a poco se me ha ido yendo de las manos por un grave problema que tengo de mitomanía y ego. Ni soy veterinario, ni soy herpetólogo. Tengo conocimientos que no son básicos de animales, pero tampoco son conocimientos profesionales. No tengo cáncer. Llevo años tratándome de una mielodisplasia, pero no tengo cáncer. Todos los animales que hay en el santuario han sido comprados, por lo tanto, podríamos definir que es más una granja de animales que un santuario. Nunca he rescatado animales; todo ha sido parte de un show que poco a poco también se me ha ido de las manos".
A continuación, se disculpaba con Chi, el que fuese su colaborador en Tailandia y quien poseía información privilegiada que podía llevar a la policía: "En su momento hablé mal de Chi porque su proyecto podía haber llegado a ser una competencia para mi negocio, y por celos empecé a hablar mal de él a sus espaldas. De corazón, le deseo lo mejor en su proyecto si algún día lo pone en marcha. También quiero decir que los rumores de que él llevaba el tema del dinero en el santuario son falsos. En todo momento, yo he sabido cuánto dinero entraba en esa cuenta, y fue idea mía que las transacciones se hicieran a través de una cuenta diferente. Los animales que han muerto en el santuario, en su mayoría, fue por mi propia negligencia. Pero la situación ha ido mejorando desde hace un tiempo; intento aprender más y mejorar cada día". Por último, explicó cómo sucedieron los acontecimientos de su detención: "Con respecto a mi detención, ninguna de las personas que fueron señaladas tiene nada que ver con la misma. Yo tenía unos animales sin papeles legales en esos momentos, y fue la denuncia anónima de una ciudadana tailandesa lo que alertó a las autoridades. Y para finalizar, asumo mi responsabilidad por haber engañado a todos y pido disculpas públicas por haberme aprovechado de tanta gente".